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El canto de las sombras
y besando mis sienes que ceñía el rocío, al edén me condujo sobre el tul de sus alas.
Desterrar lo pasado y querer nuevamente? El amor, la ventura, otra vez el alcázar?... En las húmedas sombras de aquel sueño despierto, grita Eolo a lo lejos, Libitina me aguarda;
Flora tísica muere, el invierno la agobia, gime Céfiro al verla sobre el mundo postrada, y Cupido que es viejo, por el ancho camino tráeme la primicia de un girón de mortaja.
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