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BARROS VIDRIADOS

sa, de vasos vidriados y de tipo seguramente griego.» Los autores que seguimos citan en apoyo de esta doctrina, tres vasos notables; el cenochoe encontrado en Benghazi, con figuras, en las cuales se observan restos de dorado y colores que lleva la dedicatoria *( Ofrenda á) la reina Berenice, Buena Fortuna,^ Otro cenochoe descubierto sobre el emplazamiento de la antigua ciudad de Curium, adornado de una guirnalda unida á dos máscaras de Sileno, y que contiene el nombre de Tolomeo Filopator; y por último, un tercer oenochoe con esmalte verde, procedente de Canusium, clasificado de fines del segundo siglo de nuestra era. Otros ejemplares pueden citarse: p. e.: el precioso vaso que representa á Eros sobre un pato; el cántaro vidriado de azul con dibujos obscuros, procedente de Tanagra, que se conservan en los museos Británico y de Berlín, respectivamente; y el interesante ejemplar que posee el Louvre, publicado por los señores Rayet y Collignon, en la obra de donde tomamos estas noticias, con otros muchos más que aquellos ceramófilos citan en su docto trabajo.

No pasaremos además por alto, la mención de los fragmentos de alfarería que tuvimos el gusto de examinar en el Louvre en la primera Sala de la cerámica griega antigua, procedentes del donativo de Mr. Paul Gaudin. Los hay vidriados con verde tinta (óxido de cobre) y melados (precipitado rojo) y blancos (de plomo y estaño). Entre ellos nos llamó la atención un trozo de vaso, en cuya parte superior se ven dos zonas lisas: la primera verde tinta, y la segunda melada; separadas por filetes de relieve. Debajo del segundo, corre un adorno, que parece de hojas invertidas, y de este mismo motivo se hallan restos en la parte inferior. En los espacios que dejan las hojas, hay puntos de vidrio, casi rojo, más ó menos intenso, y otros negros (manganeso). La descomposición de los esmaltes por la acción del tiempo, ofrece las mismas bellas irisaciones plateadas que las de nuestros barros. También se ven de estos fragmentos vidriados, en la colección donada por el Barón de Baye, recogidas en Crimea.

En la Sala de los Orígenes comparados y en una de las vitrinas del centro, hállanse los vasos, números 349, 345, 346 y 347,