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ordena el heroismo; pero el género humano tiene co- ronas y altares para los mártires y los héroes».
50. Los preceptos de justicia se encierran en estas fórmulas juridicas: «No dañar á nadie; á cada uno lo suyo; vivir honestamente»: el Cristianismo los comprendió todosen este sensible precepto: «Al pró= jimo como á ti mismo».
51. Derechos naturales.—Cada uno de los deberes estrictos que hemos de cumplir, dá origen á un dere- cho imprescriptible. Eldeber de conservar la vida, hace nacer el derecho de velar por ella. Las ideas de deber y derecho tienen pues una relación necesaria. Todo derecho en uno, supone un deber en los demás, y reciprocamente.
Estableciendo y caracterizando los derechos natu- rales que corresponden al hombre, por el solo hecho de serlo, quedarán implicitamente fijados los deberes correlativos.
Los derechos naturales son: la personalidad, la igualdad, la libertad, la propiedad y la asociacion. Se llaman naturales, porque sin su posesión el cum- plimiento del destino humano sería imposible, y por- que derivan de nuestra propia naturaleza, no ha- ciendo las leyes positivas sinó reconocerlos y regla- mentarlos.
52. Derecho de personalidad. —El hombre es un sér que no solo vive física sino espiritualmente; la idea
