Si las fieras naciones del Estado
de Arauco, no domado eternamente,
con rebelada frente se desvían;
si al Rey, a quien servían, la obediencia
niegan con tal violencia; si mataron
a Valdivia y llamaron a altas voces
a un bárbaro, feroces, rey y dueño,
¿qué importa que el isleño se nos rinda
que con Arauco alinda, pues se espera
guerra dudosa y fiera? Mas el Cielo
verá mi honesto celo, el rey de España
esta imposible hazaña y todo el mundo
aquel valor profundo del que ha dado
la sangre y nombre Hurtado a los Mendozas.
DON FILIPE:
Si el fin dichoso gozas que pretendes
y el nombre Hurtado estiendes en el Polo
Antártico, tú solo decir puedes
que de Alejandro excedes las memorias,
que con tantas vitorias su bandera
pasó la India fïera, y este día
Alejandro sería justa cosa
que la Fama ambiciosa te llamase,
que aunque el Hurtado pase al mayor hombre,
no será Hurtado sino propio nombre.