Diferencia entre revisiones de «Página:Barreda Cronicas.djvu/150»

De Wikisource, la biblioteca libre.
Wikisource-bot (Discusión | contribs.)
Pywikibot touch edit
m →‎No corregido: Mejora de OCR + encabezado
Estado de la páginaEstado de la página
-
No corregido
+
No corregido
Cabecera (noinclude):Cabecera (noinclude):
Línea 1: Línea 1:
{{c|— 150 —}}
Cuerpo de la página (para ser transcluido):Cuerpo de la página (para ser transcluido):
Línea 1: Línea 1:
150
üeza con que todo lo observaba. 'Tampoco podia ser uno de
ñeza con que todo lo observaba. Tampoco podia ser uno de
tantos merodeadores, venidos de la frontera, porque, como
tautos merodeadores, venidos de la frontera, porque, como
ya lo ha demostrado, se hallaba sin armas, y los bandidos
ya lo ha demostrado, se hallaba sin armas, y los bandidos
que infestaban aquellas comarcas no iban sin ellas.
quo infestaban aquellas comarcas no iban sin ellas.
.Alli se detuvo y alli cayó rendido; bebio, con ansia,
* Alli, se detuvo y «alli, cayó rendido; bebió, con ansia,
del agua manantial y, reclinando la cabeza al pie del tron-
del agua manantial y, reclinando la cabeza al pie del tron-
co de aquel árbol, cruzo los brazos y cerro los ojos.
co de aquel árbol, cruzó los brazos y cerró los ojos.
Y era á bl á quien
Y era á él a quien «la gran espia de la tribu charrua,
la invocadora de Añá-gun/po contra los malditos cristia-
la invocadora de Añó-gualpo contra los malditos cristia-
nos>» rastreaba.
nos,» rastreaba.
Pie de página (noinclude):Pie de página (noinclude):
Línea 1: Línea 1:
<references/>

Revisión del 20:32 7 feb 2021

Esta página no ha sido corregida
— 150 —

150 ñeza con que todo lo observaba. Tampoco podia ser uno de tautos merodeadores, venidos de la frontera, porque, como ya lo ha demostrado, se hallaba sin armas, y los bandidos quo infestaban aquellas comarcas no iban sin ellas.

  • Alli, se detuvo y «alli, cayó rendido; bebió, con ansia,

del agua manantial y, reclinando la cabeza al pie del tron- co de aquel árbol, cruzó los brazos y cerró los ojos. Y era á él a quien «la gran espia de la tribu charrua, la invocadora de Añó-gualpo contra los malditos cristia- nos,» rastreaba.