Diferencia entre revisiones de «Carta a Filena»

De Wikisource, la biblioteca libre.
Contenido eliminado Contenido añadido
LadyBots (Discusión | contribs.)
Página nueva: {{TextQuality|75%}} {{encabezado con notas|Carta a Filena|Antonio García Gutiérrez|<small> En esta transcripción se ha respetado la ortografía original. Publicado en la [[Revis...
 
actualizando página
Línea 1: Línea 1:
{{TextQuality|75%}}
{{TextQuality|100%}}
{{encabezado con notas|Carta a Filena|Antonio García Gutiérrez|<small> En esta transcripción se ha respetado la ortografía original. Publicado en la [[Revista de España: Tomo II#Número 06]].</small>}}
{{encabezado con notas|Carta a Filena|Antonio García Gutiérrez|<small> En esta transcripción se ha respetado la ortografía original. Publicado en la [[Revista de España: Tomo II#Número 06]].</small>}}


<pages index="R.E.-Tomo II-Nro.06-Id.02.djvu" from=1 to=2 />
__NOTOC__
{{Texto|R.E.-Tomo II-Nro.06-Id.02.djvu/1}}
{{Texto|R.E.-Tomo II-Nro.06-Id.02.djvu/2}}
</div>





Revisión del 23:49 1 feb 2012

Plantilla:Encabezado con notas

CARTA Á FILENA.


(Imitación de una poesía escocesa.)


 Aunque siempre fuí cobarde
Contigo, amoroso alarde
Hacer de un recuerdo quiero:
Era á mitad de Febrero;
Era á mitad de una tarde.

 Con el alma de amor llena,
Buscando alivio á la pena
Que mi corazón traspasa,
Llamé á tu puerta, Filena,
Y estabas solita en casa.

 No sé si aliviar quisiste
Mis amantes desvarios:
Ello es que viéndome triste
Enternecida pusiste
Tus labios sobre los mios.

 Sin duda fué caridad:
Sin duda fué solo un medio
De mostrarme tu piedad;
Pero ¡ay! que ha sido el remedio
Peor que la enfermedad.

 Mira, Filena querida,
Si hay desdicha parecida
A esta mi desdicha fuerte:
Lo que á tantos da la vida
A mi me ha dado la muerte.

 Desde entonces no reposa
Mi alma, y sín cesar me quejo:
Desde entonces, niña hermosa,
De tu boca temblorosa
Guardo en mis labios el dejo.

 Es una dicha y la lloro;
Pero con tanto egoismo
La guardo como un tesoro.
Que algunas veces, yo mismo
Me parece que la ignoro.

 Que á más de ser yo muy hombre,
Tu concepto me es sagrado;
Y, para que más te asombre,
Desde entonces he encerrado
En mi corazón tu nombre.

 Solo si alguien por antojos,
O porque ve que ya apunta
La amarillez en mis ojos.
Lastimado, me pregunta
La causa de mis enojos;

 Porqué á las gentes esquivo
Y en amoroso embeleso
Vagando voy pensativo.
Respondo: «¡Me han dado un beso
Y desde entonces no vivo!»

Postdata.

 Pero, oye y valga verdad:
Si no tienes otro medio
De mostrarme tu piedad,
Vuelve á aplicarme el remedio.....
Y siga la enfermedad.


A. García Gutiérrez.