¿Tú espliego?, ¡Y me negarás
que es amor! O ¿eres barbero?
CÉSARO:
Decio, la mayor venganza
que Laura tendrá de mí,
es que una villana ansí
me obligue a hacer tal mudanza.
Conflésote que la adoro.
DECIO:
Fáciles muros contrastas.
CÉSARO:
Ni perlas en conchas bastas,
ni en sayal guarnición de oro,
ni el sol que por la mañana
por nubes tienda el cabello,
sale más bizarro y bello
que la graciosa villana
entre el grosero vestido,
donde la naturaleza,
sin el arte, a su belleza
su poder todo ha rendido.
Si vieres la sal que tiene
cuando habla, aunque el lenguaje
corresponde con el traje;
si el donaire con que viene
a vender vieras despacio,
yo sé que me disculparas
y su aldea ventajaras
a la corte y el palacio.
Ocho días ha que salgo
a verla, y después de vella
quedo más muerto por ella.