Esta vez os he cogido;
contra vos es el proceso.
¿Por qué ha de estar por vos preso,
viejo honrado y afligido,
vueso vencejo, decí,
si él a una venceja adora,
que en la sierra le enamora,
y no puede dar el sí
a la venceja que tiene
su nido allá entre los godos?
Pues que son vencejos todos,
Y estos dos se quieren bien,
casadlos, que las altivas
noblezas son espantajos,
y todos, altos y bajos,
nacimos de Adán y Adivas.
FABRIANO:
Idos con la maldición.
SABINA:
Vos el preito sentenciastes;
si vos mismo os condenastes
un asno sois con perdón.
FABRIANO:
Echa, Alejandro, de aquí
estos bárbaros, o haré
una bajeza.
SABINA:
¡A la hé,
vos sois buen juez, pues ansí
heis justicia!