Ir al contenido

Página:7 de julio - novela (1906).djvu/53

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
49
7 DE JULIO

do lo que usted pueda necesitar queda fuera. Para otro día tendré cuidado de dejarle migas de pan, por si vuelven los gorriones de hoy.

— No te burles... la verdad es que estoy incomodado contigo... Me tratas como á un chiquillo... No puedo hacer cosa alguna sin que tú lo husmees y te enteres de todo. De tal modo me vigilas, que hasta de noche, cuando dormimos, si por acaso me levanto porque tengo calor en la cama, vienes tras de mí para ver á dónde voy.

— Si usted no hiciera locuras; si se conformara con su suerte, como Dios manda, y no hubiera ya intentado una vez cometer el mayor pecado del mundo, cual es atentar contra la propia vida...

Gil de la Cuadra no contestó nada á esta razón.

— Son aprensiones, hija—dijo al fin inclinando la cabeza.—Y si fuera verdad, vamos á ver, ¿qué tendría de particular? Es hermosísima esta vida para aficionarnos á ella, ¿verdad?

— No nos falta nada.

— Nos falta todo. Honor...

— No se pierde por la persecución de la justicia cuando es injusta.

— Tranquilidad.

— La tenemos de sobra.

— No; porque ésta es la hora en que yo no sé de qué vivo, ni cómo vivirás tú el día en que yo falte.

—Y para remediar mi orfandad y mi abandono, usted quiere matarse. ¡Linda precaución!