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ANTOLOGÍA DE LA POESÍA FEMENINA ARGENTINA

LOS SAUCES

¡Cuántos sauces llorones la húmeda orilla del Luján festonean con su verdura! ¡Qué airosa tiende en ellos su colgadura de retorcidas guías, la campanilla!

Amenguando el bochorno del sol que brilla de canales afluentes por la angostura, ¡Cómo enlazan sus copas! ¡Oh, la espesura remeda un verde túnel a maravilla!

¡Sauzales que del Tigre sois la belleza, vi suelta en vuestras frondas a la Tristeza como la pena dentro los corazones!

¡Sauzales que del río besais las ondas, vi también la poesía cabe las frondas, como un hada de encanto de estas regiones!

REVERENTE SALUDO

Porque es tela bendita nuestra bandera Que en el patrio santuario fué consagrada Por bravos paladines en la cruzada Legendaria de nuestra gloriosa era,

La mujer argentina que la venera Igual que a una reliquia — ya que es sagrada — De ideales patrióticos siempre inspirada, Al saludarla ella debe, doquiera

Inclinando su frente, dejar impreso Con sus labios de rosa sublime beso En su sol, o en sus fajas de azul y albura.

Y si en alto su tela pliega la brisa, Mande «l beso en las alas de una sonrisa Que vuele de su alma toda ternura.