IDA L, RÉBOLI 379
ESCARCHA
¡Escarcha! ¡Escarcha! A manos llenas
se ha derramado
su harina blanca sobre los techos, sobre los yuyos, sobre las parvas. ¡Escarcha! ¡Escarcha! Como a puñados
por todos lados desparramada,
hasta en la rama más delgadita
del duraznero
se balancea
su borla blanca. ¡Escarcha! ¡Escarcha! Esta mañana
ha comulgado
toda la pampa.
RUEGO
Señor: porque lo quiso tu poderosa diestra
Me ungiste con la gracia y el don de ser maestra, Ya que un designio tuyo me hizo sembradora “Tu gracia me acompañe a serlo en buena hora. Evítame lo obscuro de las complicaciones,
Tan claras como el agua yo quiero mis lecciones, Tan claras y tan frescas como agua de torrente Para que su frescura se vierta en cada mente. Haz que mi mano sea de seda cuando toca,
Y llena de sonrisas el hueco de mi boca.