Página:Camila o la virtud triunfante - Estanislao del Campo.pdf/15

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada
— 15 —

bia comprender? ¿Dónde esa alma cuya pureza leia, con los ojos arrasados por las lágrimas del placer, la dulce felicidad del resto de mi vida?

—Creo Cárlos que si no eres el mas injusto de los hijos de Adan, tienes una gran facilidad para levantar procesos y sentenciar por tu esclusiva cuenta y riesgo.

—¿Qué quieres decir con eso Arturo?

—Lo que quiero decir es que antes de acusar á Camila, bien podias tomarte la molestia de averiguar lo que hay en el caso. Te dijo que la esperases en el cuarto arco de la recoba nueva y no ha venido. Bien está; ¿pero no puede haber tenido algun inconveniente? ¿La misma concurrencia no puede haberle impedido llegar á él? Confiesa querido amigo que has estado demasiado ligero en tus locos juicios, hijos de tu misma ecsaltacion y vamos al teatro, que allí tal vez las encontraremos; pues aquí hay mas del frio necesario, para convertir nuestros pobres cuerpos en dos pirámides de sal. Yo como buen amigo, al concluirse la funcion, ofrezco mi brazo á la respetable Da. Marta, tu por supuesto á la interesante Camila, y el demonio cargue con los cuatro, si antes que las háyamos dejado en su casa, no le has pedido á tu chica mas de quinientos mil perdones por tus locos juicios de celoso. Desde esta noche empiezo á ser tu lazarillo, y juro por lo mas sagrado que hay en el mundo, que conduciéndote por la espinosa senda que crees ver á tus plantas, te he de llevar de la mano, hasta