te ha sido por nosotros demandada,
de hoy más la causa nuestra con el cielo
quedará por mejor calificada,
y antes que pises de Numancia el suelo,
probarás do se extiende la indignada
fuerza de aquel que, siéndote enemigo,
quiere ser tu vasallo y fiel amigo.
¿Tenéis más que decir?
¿Tenéis más que decir?No; mas tenemos
que hacer, pues tú, señor, ansí lo quieres,
sin querer la amistad que te ofrecemos,
correspondiendo mal de ser quien eres.
Pero entonces verás lo que podremos
cuando nos muestres tú lo que pudieres:
que es una cosa razonar de paces
y otra romper por las armadas haces.
Verdad decís; y ansí, para mostraros
si sé tratar de paz y hablar en guerra,
no os quiero por amigos acetaros,
ni lo seré jamás de vuestra tierra.
Y con esto podéis luego tornaros.
¿Que en esto tu querer, señor, se encierra?