Esta página ha sido corregida
SEGUNDA JORNADA
Yzuf y Aurelio
yzuf
Trecientos escudos di,
Aurelio, por la doncella.
Esto di al turco; que a ella
alma y vida le rendí,
y es poco, según es bella.
Vendiómela de aburrido,
que dice que no ha podido,
mientras la tuvo en poder,
en ningún modo atraer
al amoroso partido.
Púsela en casa de un moro,
sin osarla traer acá,
y allí está donde ella está
todo mi bien y tesoro
y la gloria que amor da.
Allí se ve la bondad
junto con la crueldad
mayor que se vió en la tierra,
y juntas, sin hacer guerra,