Página:Compendio de la Historia de la Ciudad de Guatemala Tomos I - II.pdf/725

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
—341—

Verde, que se da en los pueblos de San Cristóval Amatitlan y pampichín y es una de las mas raras y prodigiosas producciones de la naturaleza. Es especie de langosta de color verde y su tamaño es de una jeme de largo en la estremidad de la cola cria una espina curva; cuando esta llega a endurecer se halla el animalillo en su edad perfecta: en este estado lo matan y abren con curiosidad y se encuentra en la parte esterior de sus tripas, pendiente de una vid, cierto racimillo largo como de una pulgada, compuesto de unas pepitas semejantes á las de la granadilla: sembradas éstas, producen una mata como la de la calabaza, que lleva por fruto unos calabacitos amarillos y tan lustrosos que parecen de oro; y sembrando la pepita de dichos calabacitos, á cada siembra salen mayores. Es cierto que se hace increíble, que un individuo del género animal pase á serlo del vejetal, y que un árbol sea procreado por un animal; pero es igualmente cierto que observamos en la naturaleza otras transformaciones no menos admirables que ésta y no parecen tan prodigiosas, porque son mas frecuentes: todos los dias vemos los gusanos, animales reptiles, que después de arrastrarse con gran lentitud por algún tiempo, pasan al estado de crisálida, en que pareciendo haber perdido la vida, permanecen muchos dias como entes inanimados, y cumplido el término de su amortización, sale de aquel sepulcro una hermosa mariposa, que, con su fecundidad ha de procrear multitud de gusanos, semejantes á aquel de quien ella tomó el ser. Pues si un animal reptil pasa de esta especie á la volátil, no será imposible que una parte de un animal se convierta en semilla, que metida en la tierra como en una crisálida, produzca un árbol, que dotado de fecundidad como la mariposa, dé copia de semilla que conserve y aumente la especie. A esto se añade que los mas de los animales tienen ciertas partes que no son sensitivas, sino puramente vejetales y como arbolillos que nacen en el cuerpo del animal: tales son los cabellos, las plumas, las uñas, en todo semejantes á las ramas de un árbol; pues qué mucho que algunos crien en su seno otras parecidas á las semillas de las