Página:David Copperfield o El sobrino de mi tía (1871).pdf/123

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida

111
DAVID COPPERFIELD.

Volvió hácia mí sus apagados ojos.
XV
ME CONVIERTO EN UN COLEGIAL MUY DIFERENTE.

Al dia siguiente por la mañana, despues del almuerzo, Mr. Wickfield me acompañó al colegio donde debia continuar el curso interrumpido de mis estudios.

El colegio era un edificio que se elevaba en un patio, cuya austeridad estaba en armonia con las cornejas que bajaban del tejado de la catedral para pasearse sobre el cesped, graves como monaguillos de cabildo.

Me presentaron á mi nuevo profesor el doctor Strong.

Comparé para mis adentros el doctor Strong á los viejos barrotes de la verja exterior de su colegio, tan tieso me pareció la primera vez que le ví, con los cabellos sin peinar, con un frac lleno de polvo, con sus pantalones cortos sin tirantes, sus polainas desabrochadas y sus piés descalzos sobre la alfombra de la chimenea al lado de sus zapatos.

Volvió hácia mí sus apagados ojos, que me recordaron los de un pobre caballo viejo, abandonado en el cementerio de Blunderstone. Me tendió su mano tan torpemente que no supe si debia darle la mia.

Pero al lado del doctor Strong estaba sentada una mujer muy linda y jóven, que tomé por su hija; me sacó del apuro arrodillándose para ponerle los zapatos y abotonarle las polainas, cosa