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LA CIUDADANA 57

La Constitucién consagra igualmente, que la propiedad privada es inviolable y que sélo puede privarse de ella, en virtud de expropiacién, cuando las necesidades colectivas lo reclamen y previa sentencia judicial, que se funde en una ley. Los bienes no pueden ser confiscados. Este triste procedimien- to ha sido borrado definitivamente de nuestra legislacién.

Los autores de obras cientificas y literarias y los invento- res, tienen sobre sus obras, inventos 0 descubrimientos, todos los derechos de autor que las leyes les conceden.

Todos los habitantes, son por igual, admisibles en los empleos pfiblicos, siempre que sean idéneos, de acuerdo a las leyes.

54.—DERECHOS Y LIBERTADES EN RELACION CON LA PERSONALIDAD

Estos derechos son indispensables para la Vida de todo ser humano, en su complete desarrollo. En todos los tiempos la humanidad, ha debido luchar incansablemente por su conquista y por su mantenimiento. Sin la libertad de pensar y de expresar el pensamiento, el hombre quedaria reducido a la mas triste condicién.

Argentinos y extranjeros, gozan en el territorio de la Na- cién de libertad religiosa. Pueden adorar a su Dios y pro- fesar sI_1 culto. ’

La Nacién Argentina, tiene una religién preeminente: La Catélica, Apostélica y Romana, que sostiene y protege, pero mantiene la separacién entre la Iglesia y el Estado.

Nuestra Constitucién asegura Ia libertad de pensar, su- primiendo la censura previa y prohibiendo a1 Congreso que dicte leyes que puedan restringirla.

No hay quien pueda impedir que las ideas sean publicadas pero una vez que se conozcan, si son atentatorias de la tran- quilidad general; o si por cualquier motivo constituyeran un