Sahumerio, El.
Folk.
Es un medio de obtener éxito pecuniario o erótico, como asimismo de curar enfermedades de personas y animales, aspirando las emanaciones de la combustión lenta de materias a las que se atribuyen virtudes sobrenaturales, añadiendo en algunas circunstancias negativas de índole religiosa católica.
Las normas más usuales prescriben el estricto cumplimiento de un ciclo de siete a nueve domingos, en caso de búsqueda de riqueza; del mismo número optativo de días lunes, si se procura trabajo remunerado; y de igual cantidad de días viernes, para combatir la mala salud, en forma absolutamente ininterrumpida, recomendando la madrugada o el anochecer para quemar sobre brasas de carbón, en un recipiente cualquiera, pequeñas porciones de incienso blanco, negro y mirra, en partes iguales. Para el último de los propósitos aludidos es particularmente eficaz agregar a la petición de la gracia algunas oraciones comunes del catolicismo, como ya queda dicho, y pasar varias veces en cruz por encima del tiesto en que se prepara el sahumerio.
La principal y en la actualidad casi única aplicación en el terreno zoológico, recae en caballos aquejados de afecciones bronquiales, producto de rápidos enfriamientos al ser desensillados o beber agua, inmediatamente después de una actividad intensa, afecciones cuyos síntomas se evidencian en una tos seca y persistente y un constante fluir de líquido por la nariz. El sahumerio indicado para esta situación consta de excrementos de vacuno, un par de nidos de aves menudas y una rama de canelo - probable influjo mágico de los aborígenes chilenos - encendidas en el interior de un balde u objeto similar. El caballo se pone bajo techo y se le tapa con sacos la cabeza y el lomo, tratando que penetre el denso humo que se forma, por sus fosas nasales. La firme creencia en este procedimiento pone el resto del buen resultado, y la mejoría es cuestión de poco tiempo
Aunque
