NUM. 14.º
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MADRID 4 DE ABRIL DE 1869.
Provincias.—Tres meses 28 rs.; seis meses 50 rs.; un año 96 rs.— Cuba , Puerto Rico y Extranjero, un año 7 pesos.—América y Asia, 10 a 15 pesos.
AÑO XIII
C
orrido lian estos di;u ru moros do haberse .aliado la Francia, el "'Austria y la Italia, y á este plan , formado á la sordina, se atribu yen las causas de lanías idas y venidas, lanías vueltas y revueltas, como lian dado en el mes anterior los señoros diplomáticos Nigra , La Gueronniére, Gramoul, Werther., Ignatieff, Kuh.eek, Flemming, y lo que es más, se quiere enlazar la retirada del conde Usedom de la corte de Florencia. Si la tal alianza es un hecho, redundará en benefi cio de Napoleón, que por este medio podrá mas fácil mente adquirir el Rhin, y la Italia satisfacer alguna de las esperanzas con que sueña . sin que sepamos todavía lo que va ganandci el Austria á quien muchos le asig nan el papel del gato de la fábula. Que algo se Irabaja por debajo de cuerda es cosa innegable, porque diaria mente nos vienen los periódicos oficiales franceses con indicaciones de bélicos preparativos en la frontera oriental, ya en Longroy, frente á Luxemburgo; ya di ciendo hallarse á la orden 1 10,000 hombres licenciados temporalmente; ya, en fin, anunciándonos, nótese bien, que el ministro de Estado lia dirigido una circul.ir A los acreditadas en las corles estranjeras para que nieguen á pie juntUlas que baya tales borregos como los dichos aprestos militares. La verdad es, que no hay que tomar por norte la prensa oficial francesa para adivinar los planes de la política del emperador, porque ésta, desde hace mu cho tiempo, es inescrutable para los ¡profanos. Por olra
MADRID 4 DE ABRIL DE 1869.
Provincias.—Tres meses 28 rs.; seis meses 50 rs.; un illa 96 rs—Cuba , Furto Hico v Extramero, AIsO XIII un aiio 7 pesos.—Auf.rica y Asia, 10 á 15 pesos.
parte, son tantos los periódicos sem ¡-oficiales, ó por visto que el viaje del sultán y del virey de Egipto |xir algún concepto sujetos al influjo ministerial, que el Europa en 1867, ha dado á estos personajes un tinto pobre lector francés apenas sabe si lo que lee es reflejo parisiense tan pronunciado, como el que loman los de la opinión pública, ó es consigna ministerial. Y lo bouryeois de vuelta de su expedición á la ciudad de los mismo sucede con los libros y folletos, que no bien se placeres. El Cairo ha estado recientemente convertido anuncia uno, cuando ya lleva la cola obligada de que en un pettt París, y Constantinopla no se le quedará está inspirado en altas reijiones. Resultado, que na á la zaga. En cambio, no sólo en las costumbres tur die sabe hácia qué cuadrante señala la brújula , y hay cas se comienza á sentir el influjo francés, sino en la con este misterio y oscuridad gran comidilla para los administración y en la política. La reserva está á pun to de ser organizada según el modelo prusiano, que ociosos. . Las próximas elecciones generales en mayo es un su es el que va poniéndose de moda, y toaos los otoma ceso cuya importancia se deja vislumbrar desde hace nos cualesquiera que sean sus razas y religiones serán tiempo en la conduela del emperador para con sus admitidos sin distinción en el ejército turco y tendrán subditos, á quienes trata naturalmente de hacerse pro derecho á elevarse ¡i los más altos cargos de la milicia, picio. Después de su última indisposición contraída por con lo cual resultaría al sultán una economía en el exceso de actividad, presidió un consejo en que pro presupuesto de la guerra , no menor que la que. con puso la abolición de la ley que oblig.iha á obreros y templan nuestros republicanos al proponer que seamos criados á inscribirse en los libros de la policía como en soldados en nuestras casas todos los españoles. Inglaterra los licenciados de presidio. Nada más cuEn Inglaterra prosiguen los importantes debates sorioso que las sentencias y máximas de altísima moral bre la cuestión de la iglesia de irlanda. Fuera de las aplicada á las naciones, que encierra el preámbulo de ! regiones oficiales ha habido gran cosecha de sucesos la ley, derogatoria de otra establecida por él mismo, y que reseñar, no siendo de los menos significativos la á la cual califica de indigno abuso. Pero esto no extra- j huelga en que se han declarado los trabajadores en ña tanto en un jefe del Estado deseoso de ganarse el I Preston, distrito algodonero de consideración, de reafecto y buena voluntad del pueblo en vísperas de ne- sullas de la reducción de jornales acordada por los cesitar de él , como la aquiescencia de los franceses, fabricantes. Hasta ahora se han declarado. en huelga sometidos por espacio de diez y siete años á un sistema i los obreros de ocho fábricas. Dentro de pocos dias se cerrarán oirás veinte y tres por la misma causa, resul inquisitivo tan denigrante Las noticias que tenemos de las fiestas religiosas de tando que para el 17 de abril próximo se calcula la Semana Santa en Roma, describen la ciudad eterna en 1(5,000 el número de trabajadores que quedarán poblada por nada menos que treinta mil forasteros de , sin empleo. Frecuentes reuniones se están celebrando todas partes del mundo, los cuales, además de las fun i por los operarios en Lancasbíre, Derbyshire, Yorkshiciones ile costumbre , han tenido este año nuevos ali re y Cheshire, distritos esencialmente manufactureros, cientes con que satisfacer su curiosidad en los con con objeto de ponerse de acuerdo en las medidas que ciertos monstruos, iluminaciones d d Coliseo y del Foro, deben tomarse para dirigir é imprimir á la huelga el excursiones arqueológicas, cacerías y carreras de ca carácter y sesgo más conveniente al logro del triunfo ballos, representaciones de madame Ristori , y sobre sobre los empresarios capitalistas duewi de las fátodo la solemnidad que se prepara en el pequeño asilo ¡ bricas de Tala-Giovani para celebrar el jubileo de la entrada El castigo ejemplar ha seguido inmediatamente al de Pió IX en el sacerdocio y el aniversario de su vucl- desmán de los chinos contra la tripulación inglesa del Cockrhafer, de una manera algo parecida á la jurisla á Roma después de su destierro á Gaeta. Por otra parte anúncianse también festejos no me- prudencia Lynchiana de los norte-americanos. Las ñores en numero, aunque de otro carácter, en la fuerzas reunidas de los buques Rinaldo , Perseo , LcRoraa del mahometismo, á consecuencia de la proyec- ven, Bouncer y la ya mencionada cañonera saltar ¡n en tada visita de los príncipes de Cales á Constantinopla, tierra en número de doscienlos cincuenta hombres, que ya debe haber tenido lugar, y en donde habrán I provistos de cuatro cañones Artnstrong. Anles de co-
