es mudanza que en los profanos aplaudimos constan temente. Lo único que fas gentes timoratas pudieran censurar en esto, es un si es no es de sombra de apostasía, atento el sagrado carácter de que estaba revestido; pero estos son escrúpulos de monjas, propios de gen tes melindrosas. La prueba de la sinceridad de su nue va vocación liberal , fue que , sin descuidar el trato y conversación de sus antiguos amigos, se consagró á la árdua y penosa tarea de implantar en- terrenos vír genes esa misma semilla que por súbita inspiración ha bía arraigado en su mente, para lo cual obtuvo en 1846 su primer título académico , que fué el de Regente de segunda clase en Historia. Pero nada de esto podía calmar la febril impaciencia propia de hombres de su talla. No contento con los lau reles conquistados en el púlpito, quiso emularlas glqr rias de Herodoto y Tucídides, y como vacase en 1847 en San Isidro, una cátedra de Historia, presentóse á oposición fray Fernando, quien libre y desembarazado Sr. director de El Museo Universal. de rivales y contrincantes, (porque no los hubo), con Muy señor mío : quistó la cátedra que solicitaba, no obstante la oposi Proponiéndome escribir acerca de la manera mas ción del distinguido orientalista é historiógrafo señor propia de organizar sobre bases sólidas el poder docen don Pascual de Gayangos, que era uno de los indivi te, con estricta sujeción al principio democrático de duos mas doctos del jurado. libertad, tarea dificultosa y preñada de obstáculos en el Con el fin de afirmar sobre sólida base su nueva posi terreno de la practica , me ha parecido oportuno echar ción , quiso trabar amistades con las personas notables antes una rápida ojeada sobre aquellas personas llama en la república de las letras, y con este propósito tra das inmediatamente á coadyuvar pro muñere officii á bajó hasta conseguir la privanza de don Antonio Gil la realización de tan saludables principios. Como el de Zárate, á la sazón Director General de Estudios. En periódico que usted dignamente dirige, sea el mas auto opinión de aquel alto empleado , pasaba nuestro Thaurizado por la claridad, elevación y desinterés con que maturgo por ardiente católico y fervoroso sustentador en mas de una ocasión ha sabido herir algunas de las de la moral mas pura en la educación de la juventud, muchas dificultades que demandan pronta resolución, y esto lo confirmó dando á luz un Manual de Historia ruego á usted muy encarecidamente me conceda en él para la enseñanza universitaria, declarado de texto por un espacio para desenvolver el contenido de varios los obispos en sus seminarios conciliares , logrando asi apuntes que hace tiempo duermen en mi cartera. que alcanzase su libro varias ediciones. Dicen, sin em Doy á usted anticipadas gracias y aprovecho esta bargo, los Zoilos, que el padre Castro hizo aquí lo que ocasión para ofrecerme su mas atento S. S. Q. B. S. M. la abutarda de la fábula , y gue el libro que dió como original era francés, y por añadidura dedicado á la en F. Rivero. señanza de las niñas; pero esto, como se ve, no dismi nuye en nada el mérito de la producción. Nadie negará MUSEO BIOGRAFICO. que si era francés , el santo varón tuvo que verterlo . al castellano, aunque no sea el de Mendoza ó de Gue FRAY FERNANDO CASTRO Y PAJARES. vara ; y si estaba dedicado á las niñas, tuvo que hacer La exposición internacional de artículos de econo Entre los siervos de Dios cuyo olor de virtudes ere- I mutatio caparum, y dedicarlo á los varones : trabajo mía doméstica, que en otro número anunciamos, ha ció lejos de aminorarse al ponerles la exclaustración en árido y penoso que sólo por acendrado amor á la cienbía de celebrarse en Utrecht, tendrá lugar en Amster- contacto con el mundo y en el trato y conversación de ciencia echó nuestro historiador sobre sus hombros. dam en los meses de agosto , setiembre y octubre de los profanos, contarse debe preferentemente á don Fer Los obispos españoles , que siempre se han distin este año. La causa de la variación de lugar es, que en nando Castro y Pajares, fraile güito de la provincia de guido por su ciencia y sus virtudes, apresuráronse á Amsterdam existe ya un edificio á propósito para el León (Sabagun), que muy luego se dió á conocer por honrar con sus sufragios la obra del insigne catedrático caso y allí puede celebrarse en mucha mayor escala y su celo religioso , y por sus dotes especiales en la elo de Historia, y á tan señaladas muestras, correspondió ofreciendo mas comodidades á los expositores que en cuencia sagrada. En los conventos de monjas, donde éste poniéndose de parte de la reacción benéfica , que Utrecht. mas á la continua ejercía este ministerio, extasiaba á las por aquel entónces arreciaba en la pública enseñanza, esposas de Cristo, sembrando sus pláticas de amorosos y por ende en los libros á ella destinados. En su no conceptos, de tiernos deliquios , de ese elevado misti ble deseo de corresponder á la confianza que en él de El Viernes Santo tuvo lugar en Lóndres una demos cismo erótico, que autores graves califican de morbosa positara el episcopado, publicó una edición expurgada tración pública por parte del pueblo en obsequio á la mentís cogitatio, y que puesto en el verdadero punto del Quijote, trabajo que le dió merecidísima reputación memoria del finado Ernesto Jones, uno de los radica de la discreción por nuestro predicador, le valió el ser entre los clericales; pero que hizo poner el grito en el les mas notables por su elocuencia tribunicia y su amor equiparado á los Granadas y Vicentes en el árduo mi cielo á los cervantistas, quienes decían, que aquello era hácia las clases pobres. Este hombre popular fue muy nisterio de dispensar la palabra divina. querer enmendar la plana al príncipe de nuestros in perseguido por los tories , y se cuenta de él , que eii No satisfacía empero este aplauso á nuestro francis genios , hacer una corta y poda en una obra , que es los dos años que le tuvieron preso y no le permitían el cano, quien comprendía que al arte debía ir unida la texto glorioso de nuestra lengua, meter la hoz donde uso de tinta ni papel , se hacia pequeñas heridas y con erudición y la ciencia, y sobre todo, la ciencia de la no osaron los fanáticos inquisidores del siglo XVI, y su sangre escribió en las márgenes de su libro de ora historia, tanto mas necesaria en el orador sagrado, quitar á trompa y talega oro de buena ley, por lo que, ciones un poema en verso. cuanto que conslantemente tiene que ver en ella el de al osado abreviador se le antojaba hierro viejo, suscep do de la Providencia. Dióse, pues, á los estudios histó tible de alterar la sangre de niños católicos. ricos, y aunque quieran decir los malévolos y envidio | Ya en esta via, que algunos califican de reacciona Alejandro Dumas, hijo, y Mr. Riviere han visitado á sos, que sus adelantos no le pusieron siquiera al nivel ria, y asegurada ya su reputación de clérigo austero, Monaco durante la Semana Santa, para ser testigos de los Daunou y oíros maestros de segundo orden, lo fácil le fue llegar en alas de su buen nombre hasta las oculares de un resto de los espectáculos místicos tan cierto es, y esto nos basta para muestra de su sufi gradas del trono. Para sus émulos fue un golpe terri frecuentes en los siglos XIV y XV, y de los cuales nos ciencia, que Amador de los Ríos, le nombró secretario ble su entrada en palacio, y asi procuraron acibararle, da tan animada descripción Víctor Hugo en su obra, de la comisión de monumentos de aquella provincia, propalando que logró introducirse en tan alto lugar, Nuestra Señora de París. Parece que en Monaco hay i Los hombres de talento y de genio, no pueden dar ex no por sus méritos de escritor religioso y asceta, sino la costumbre de celebrar al vivo la escena de la cruci pansión á las ideas que agitan su mente en el estrecho gracias á ciertas amistades que nunca le faltaron entre fixión. Uno, que hace de Cristo, coronado de espinas, recinto y mezquina atmósfera de una provincia: asi es, las devotas y santeras ; pero bien se ve que aquí hay con la cruz á cuestas y rodeado de soldados romanos, que obedeciendo á esta ley común , trasladóse nuestro suposiciones gratuitas , porque cabalmente era usanza asciende una pendiente que hay detrás de la ciudad y padre predicador á Madrid , vasto campo donde muy tradicional de la derrocada dinastía, el llamar á sí, y en el sitio llamado Calvario, se verifica la final escena, en breve babia de recoger opimos frutos. Desde luego premiar con afán solícito á los hombres modestos , de aunque el cronista que nos informa no ha andado es- supo captarse la amistad íntima de Ferrer del Rio, com ■ verdadero mérito y nada amigos de la intriga. plícito en esto, y queda al lector la duda de sí la cru parable por mas de un concepto, á la que en tiempos Muy en breve llégó nuestro varón ejemplar á cape cifixión es real y verdadera. antiguos ligara con vínculos tortísimos á dos célebres llán de honor , distinguiéndose entre los de su clase, atenienses, famoso el uno por ser el último de los sofis por el fervoroso recogimiento con que celebraba el tas , y notable el otro, asi por el talento como por las santo sacrificio de la misa en presencia de las reales Según disposiciones testamentarias del maestro Ber- peregrinas genialidades con que dió ripio á la mano á personas , y principalmente de la que ocupaba el tro lioz , sus manuscritos pasan á poder del Conservatorio los cronistas de su época. no , quien poco después agració al venerable Pajares de París; sus battutas, como director de orquestas, á Como el púlpito había sido el teatro de sus glorias en con la cruz de Cárlos III. Mr. Alexandre, y la edición de sus óperas á su editor provincia, su primera salida en la córte, naturalmente Su noble ambición no se limitaba á esto. Aspiraba á Mr. Dacmé. debió ser en la cátedra y ante el auditorio femenino, lo que desea todo buen clérigo, es decir, á episcopar. que sabia conmover con el arte especial de su mística Los mismos influjos á que debió la capellanía de honor, El instituto de Ingenieros civiles, de Lóndres, ha elocuencia. Predicó, en efecto, en el convento de mon conspiraron de nuevo á fin de que fuese presentado para nombrado al emperador de los franceses miembro ho jas de don Juan de Alarcon, un notabilísimo panegírico la mitra de Orihuela ; pero su condición de exclaustra norario, en atención á las grandes empresas que ha en el que, á vueltas del olor y sabor afrodisiacos, que do refractario y capellán de honor fue causa, sin duda, protegido, alentado y llevado á cabo en beneficio de era su distintivo, reveló aficiones francas y abiertas á de que por tres veces consecutivas le rechazase la cu la política, que en tiempos mas felices representara el ria romana. Deshauciado ya de episcopar , la adhesión fos pueblos. Pretendiente. de fray Fernando á la Santa Sede, trocóse en desvío, Nuestros lectores estrañarán que tales fuesen los prin y el amoral trono en odio reconcentrado, buscando cipios del que hoy es Rector de la Universidad Central, fior otro camino una compensación á sus deseos , que Con la carta que á continuación verán nuestros lec precisamente porque representa ideas contrarias á las e ofreció Gil de Zárate en el nombramiento de direc tores , se nos ha remitido un Ensayo biográfico , que que aquel aspirante al trono de España lógicamente re tor de la Escuela normal de profesores de segunda en no hemos titubeado en insertar en las columnas de El presentara. Pero no debe haber motivos de estrañeza: señanza entonces creada. Suprimida esta escuela por Museo, tanto por ser periódico especialmente destinado sapientibus est mutare consilium. Sobre todo, pasar de razón de economías como todos saben , nuestro direc á tratar de las cuestiones que en este ensayo se venti la intolerancia mas fanática, á la mas ámplia libertad, tor, que quedaba cesante, mereció sin mas fórmula
mer, por via de luneheon, ó sea para tomar las once, quemaron la población de Tangtun. En seguida comie ron v avanzaron hacia Poting, en donde el enemigo rompió el fuego mantenido por largo rato , mientras los ingleses agazapados mandaban avanzadas para recono cer los medios defensivos con que contaban. Hecho esto avanzaron en línea , escalaron las murallas y los echaron de la población obligándolos á refugiarse en la de Outing-Poi. Allí penetraron los ingleses, acorrala ron á los enemigos y pusieron fuego á la ciudad que en breve quedó hecha un montón de cenizas. Los chinos, al ver tanto estrago, les enviaron comisionados ;í pedir misericordia, temiendo que aquel pelotón de endiabla dos no fuese á destruir todo el celeste imperio. La situación de Cuba, aunque grave todavía, no nos impide entrever la. esperanza de un próximo desenla ce ; tanto mas anhelado , cuanto que noy es el dia , en que, dentro del seno de la representación nacional, y de acuerdo con los diputados conocedores de los ver daderos intereses de las Anl illas, ha de fijarse esa or ganización definitiva que satisfaciendo las legítimas aspiraciones de la libertad y el progreso, contribuya á asegurarlas un porvenir próspero y dichoso. En nuestra España el gran acontecimiento es la pre sentación y lectura del proyecto de constitución que tuvo lugar el martes 30 del mes de marzo, dia cele bérrimo en la historia política de España, nación famo sa en esto de fraguar constituciones, aunque no de buena fama en punto á observarlas. Mucho ha dado que pensar el tal proyecto á todos los que en la cosa pública se ocupan, que hoy dia es el pueblo en masa, linos la encuentran tal como es necesaria para que un rey la acepte con decoro. Otros la juzgan como un gran paso sobre las anteriores , en cuanto consigna las libertades y derechos individuales ; y otros, en fin, la encuentran asaz de doclrinaria. Como quiera que el proyecto ha de sufrir gran número de modificaciones, rectificaciones y enmiendas, aun no sabemos qué sim ples predominarán en la confección definitiva de este compuesto. Nicolás Díaz Benjumea.
lan , como por ser su autor persona competente, agena á toda pasión, y conocedor por añadidura de cuanto pasa en la Universidad central y en la facultad de filo sofía y letras de la que es doctor. Si lo que en él se apunta es cierto , cosa que no dudamos , puesto que el autor se presenta alzada la visera, habremos cierta mente prestado un gran servicio á los intereses de la enseñanza pública en España con dar publicidad á este trabajo , y con el propósito que tenemos de darla en adelante á los demás apuntes biográficos de otros va rios personajes que llaman hoy la pública atención en este enmarañado negocio de los estudios españoles y que el autor liberalmente nos promete. De todos modos, á su disposición tiene el señor de Castro las páginas de El Museo para contestar al co municante lo que le parezca oportuno.
Hé aquí la carta y el artículo á que nos referimos:
