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GRANJA DEL RETIRO (PROVINCIA DE ÁLAVA) PROPIEDAD DEL ILMO. SEÑOR DON MIGUEL RODRIGUEZ FERRER.


¿Qué tengo, pobre de mí, hoy de haber vivido ayer? Solo tengo el no tener las horas que ayer viví: lo que hoy de ayer discurrí diré mañana si soy; pero tan incierto estoy de que mañana seré que quizá no lo diré por haberme muerto hoy.

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Ahora, pues, desengañado llorar quiero arrepentido, mi Dios, lo que os he ofendido tan ciegamente ignorado: pésame de haber pecado y aunque el dolor del tormento dió motivo al sentimiento no es por eso lo que lloro; que solo porque os adoro el haber pecado siento.

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Piensa que te has de morir, piensa que hay gloria é infierno, bien y nial, y todo eterno y que juicio has de venir. Ponte luego á discurrir tu vida y modo de obrar y que ahora sin pensar, si te diese un accidente y murieses de repente ¿dónde irias á parar?

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Leyes y fin de tu estado procura observar de suerte que cuando venga la muerte con ella te halle ajustado: estima el ser despreciado por Dios, y vivir penoso abraza pronto y gustoso, que si asi vives y mueres no habrá cuando cuenta dieres juicio ni juez riguroso.

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Al lado de estas décimas tuve el gusto de ver unos versos, firmados por Enrique del Castillo y Alba, que decían asi:

Gloria al Señor que en el celeste espacio
y por la tierra su poder estiende
permitiendo la entrada en su palacio
al que de la virtud la senda emprende.
Los ángeles te alaban á porfía
con himnos de placer y de victoria
y yo, Señor, mostrando mi alegría
con ellos siempre cantaré tu gloria.

Cada vez mas sorprendido, abandoné el refectorio, y acompañado de mi guia, entré en la iglesia.

A decir, verdad, no existe en ella la unidad de adornos y bellezas que da por resultado ese conjunto armónico y magéstuosó necesario, á las obras arquitectónicas.

Anteriormente poseía gran número de magníficas i pinturas y esculturas, mas cuando la invasión francesa desaparecieron muchas, aunque hoy se conservan todavía algunos hermosos lienzos de Atanasio, de Sánchez Cotan y de Guiaquinto.

Las puertas del coro son primorosísimas y tienen delicadas ensambladuras y embutidos de plata, concha, nácar, marfil y ébano. Dichas puertas y las de la sacristía, asi como la cajonería de esta, son obra de un lego del convento, llamado fray José Vázquez.

La capilla mayor es de fábrica gótica y plateresca i y en el retablo hay una escultura representando á San j Bruno., de la cuál dijo un artista estranjero que no ; hablaba porque no hablan los cartujos.

A continuación del altar mayor está el Sancta Santorum, cuyo inimitable decorado pertenece á Francisco Hurtado Izquierdo, y los frescos á Antonio Palomino : y José Risueño.

La sacristía es magnífica y conserva algunos preciosos cuadros. En su obra se emplearon mármoles de las provincias de Granada y Málaga; y entre otras curiosidades cuenta dos ágatas que pasan por las mayores conocidas en el mundo.

La Cartuja encierra infinitos objetos notables, mas para hacer mención de todos era preciso un trabajo sumamente minucioso que concluiría por cansar al lector.

Nada satisface tanto como ver, y esto aconsejamos á quien tropiece con estas líneas.


Salí de la iglesia.

El claustro estaba solitario.

El silencio era profundo.

Fuera del monasterio todo respiraba vida y contento.

El cielo se hallaba azul.

El sol de invierno nos envolvía con sus rayos templados.

La soledad dice al hombre— medita—y el hombre obedece.

Y medité...

Allí hubo en siglos anteriores un pueblo religioso, austero, penitente. Los años pasaron, y la sociedad en sus infinitas evoluciones, gritó al monge que habitaba aquellos claustros. — Huye de estos lugares: abandona tu casa, tu retiro, los muros de tu convento. Anda, anda, anda... Y los pobres hijos de la oración volaron al viento de las revoluciones...

Hoy aquí; mañana ¿quién sabe? Ese es nuestro destinó.

Pero en la vida errante que nos concedió el cielo, ojalá que conservemos inmaculadas y puras nuestras creencias; ojalá que el torbellino del mundo al arrastrarnos á lejanos países no nos arrebate las flores mas bellas del alma. La religión y el recuerdo de la patria.

Augusto Jerez Perchét.


GEROGLIFICO.

SOLUCIÓN DEL ANTERIOR.

Los caballeros de la Edad Media eran esclavos de su palabra.


La solución de éste en el próximo número.


ABELARDO DE CARLOS, EDITOR.

ADMINISTRACIÓN, CALLE DE BAILEN, NÚM, 4.— MADRID,

IMPRENTA DE GASPAR Y ROIG.