Página:El museo universal 1869.pdf/63

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida

por describir la esencialídad de! movimiento muscu lar como una especie de poder latente llamado á ejer cicio por alguna perturbación comunicada al músculo, directa ó indirectamente por medio del nervio, la cual ilustró haciendo el esperimento con la pata de una rana y una corriente eléctrica. La perturbación que pone en ejercicio esa fuerza latente se llama estimulo, y su naturaleza puede ser bien eléctrica, bien mecá nica ó química: asi como la distinción entre movimien to voluntario ó involuntario depende de la posibilidad de averiguar si el estímulo procede ó no de la volun tad. El profesor pasó luego á considerar la acción ciliaría como un tipo estremo de movimiento voluntario, escogiendo como ejemplo el de la garganta de la rana, cuyo movimiento de que hizo esperiencias ante el au ditorio, lo describió como causados por celdillas que tienen un pelo imperceptible cual cilia, cada uno de los cuales mueve el Huido que está en su derredor pro duciendo una corriente. Dijo que esta acción es com pleja y vital , y que sobre ella ejercen indujo las circunstancias , y la afecta el calor , el frió , los vene nos, etc. , por lo que es muy semejante en su natura leza á la acción muscular. Como no hay estimulo esterno evidente para producir la contracción de un ci lio, esplieó que debía buscarse en las acciones molecu lares de las celdas ó en el mismo cilio. Probablemente, no existe allí estimulo; pero la contracción del poder latente va aumentándose basta que rompe y se mani fiesta como poder efectivo. Admiró la sabia disposición de la cilia para fines especiales, y su distribución en el reino animal. Consideró los movimientos de los cor púsculos de sangre blanca, describiéndolos como evi dentemente de la misma naturaleza que la ama?ba, que consiste en hondas irregulares de la materia menos susceptible de estructura, y que se llama «protoplas1110,1 y que se afecta bajo ei influjo de las mismas cir cunstancias que el cilia ó músculo, siendo la contrac ción muscular , en concepto del doctor Foster, sólo una onda de sustancia muscular limitada á una direc ción. El estímulo de los movimientos amoeboides de los corpúsculos de sangre blanca y de otros estravagantes elementos constitutivos del cuerpo, están en completa independencia del sistema nervioso. El celebrado Mr. Ruskin pronunció un discurso so bre la arquitectura del valle de la Somme, llamada flamboyante por el córte ondulante de sus adornos, muy parecido á las llamas, y en él tuvo ocasión de di sertar sobre la historia del arte, gótico y en general so bre has artes. Refiriéndose á la decadencia del arte gó tico en Francia, en la segunda mitad del siglo XV, dijo que la causa fue la reforma y el renacimiento de la li teratura, la primera por haber sido un movimiento de personas ignorantes, antipático al arte, y la segunda por haber destruido el arte gótico, creyendo haber en contrado otro mejor. Las faltas de una obra de arte, dijo, son las faltas de su egeculor, y las excelencias sus escelencia. El gran arle es la forma espresiva del en tendimiento de un grande hombre, y el arte mezquino el de la falta de entendimiento de un hombre adoce nado. Si las piedras de un edificio están bien puestas, significa que un hombre de talento lo ideó, que un hombre cuidadoso las corló, y que un hombre concien zudo las cimentó. La manufactura, añadió, es sólo obra de las manos ; pero el arte lo es de todo el entendi miento del hombre, y según es el entendimiento asi son sus hechos. Todo arte es corrupción ó educación. Esto se halla escrito en la historia de todas las nacio nes, en las cuales ha habido diversos períodos qu« ilus tró presentando dibujos y pinturas referentes a su ob jeto. Asimismo presentó vistas en detalle de la arqui tectura flamboyante del citado departamento de la Francia, cuyo material era una piedra blanda suscep tible de profundas incisiones y corles, la cual permitía que el artista pintase mas bien que esculpiese con el cincel, produciendo sombras y claro-oscuro de mara villoso efecto; pero superficial y vicioso como estilo plateresco y de hojarasca que no traduce con verda dera ingenuidad forma orgánica alguna. Espuso como causas de la decadencia de la arquitec tura gótica, el gran esceso en ingenuidad de construc ción, de que es ejemplo la catedral de Salishury, de bido á lo cual la inteligencia del artista perdió los in flujos déla teología, filosofía y humanidad. Negó que el arte gótico cayese por hacerse demasiado llorido y rico, sino que tuvo esta suerte por haber perdido su fe, su verdad y su sensibilidad, y ser incapaz de soste nerse, ya con la gracia de la religión pagana, ya con su gloria propia. El profesor Odling continúa sus explicaciones sobre el hidrógeno y sus afines. En su tercera conferencia prosiguió sus esperimenlos relativos á las interesantes investigaciones de Mr. Oraham, director de la Casa de Moneda , en punto á difusión de gases. Uno de ellos, tocante á la separación de gases por medio de la difu sión, fue descomponer el agua con el voltámetro en sus partes constituyentes, hidrógeno y oxígeno; mostrando la manera cómo una mezcla electrolítica de estos gases quedaba libre de su hidrógeno por su difusión y sepa ración del oxígeno durante el pasaje de! gas mezclado al través de varios tubos porosos de pipas de tabaco diversos en tamaño. Procediendo luego á mostrar la trasmisión al vacío del hidrógeno y otros gases al través del caoutchouc; esplicó la construcción ingeniosa de la bomba de aire inventada por el doctor Sprengel, que no tiene precio para investigaciones de esta natu raleza. Hizo ver que la trasmisihilídad del hidrógeno y otros gases en el caoutchouc no tiene relación con sus densidades ; y que el hidrógeno es casi dos veces tan trasmisible como el gas mas pesado; pero menos de la mitad que el todavía mas pesado gas carbónico. Espli có por último, con ayuda de aparatos ingeniosos, el cómo el procedimiento de la difusión es una parte esen cial de la respiración ; procediendo á considerar la so lubilidad de los gases en el agua , entre los cuales el ammonia es el mas y el hidrógeno el menos soluble. Finalmente el distinguido Westmacott dió también una de sus instructivas lecciones sobre Bellas artes, en la que disertando y comentando acerca de las notables obras de Gbiberti , el escultor que construyó las famo sas puertas del baptisterio de la catedral de Florencia, habló de modelos de escultura de un período impor tante de este arte en España , que acaban de ser re cientemente depositados en el museo de Kensington, y son vaciados de las esculturas notabilísimas de la ca tedral de Santiago de Compostela, obra de un español, llamado Mateo, que floreció de 1180 á 1190. El carác ter general del arte gótico, dijo, fué esencialmente re ligioso, hallándose en un todo bajo la dependencia y fiscalización del clero. Tuvo profundidad de sentimien to y gran sencillez , y, por la práctica, desarrolló una gran facilidad de egecucion. El renacimiento de la clá sica literatura y el patrocinio de los Médicis, los papas y principes de Italia suspendieron el progreso del arte cristiano, y sustituyeron el predominio del pseudoclasicismo y mera imitación del arte antiguo, del cual aun no nos hemos emancipado. Concluyó Mr. West macott señalando como razón del precario y abatido estado del arte en nuestros dias, la inlta de instrucción y de gusto bien cultivado en el público, lo que si es verdad respecto á Inglaterra, no lo es menos relativamente á España.

Ignórase aun quién puede ser el verdadero autor de El Juez de su causa; pero personas muy competentes en el asunto, aseguran que la obra es debida á don Mariano Roca de Togores, marques de Molins, y aca démico de la Española. Hónrale, si es cierto, como aca démico y como poeta, ya que no como autor dramático, y, como trabajo literario, puede figurar con ventaja aí iado de las mejores obras del autor de Doña María de Molina.

El Ramo de la vecina es una pieza en un acto , ar reglo del francés, del actor don Juan Catalina, que to mó parte en su representación, bastante notable para entretener al público con una obrilla sin asunto y sin novedad en sus situaciones. En el mismo teatro Español se ha puesto después en escena El Trabajo, comedía dividida en tres par tes, épocas las llama el autor, que, eligiendo un asun to gastado en estremo y caracteres falsos y repulsi vos, y con la base de un plan desordenado, se propu so hacer de las tablas un pulpito, sin comprender que la moral en el teatro debe resultar de la acción y de los aféelos de contraste de los caracteres, y no de lar gas liradas de versos, indigesta y pretenciosamente filo sóficos, y en los cuales, á la verdad, no muestra el se ñor Zumel escrúpulos de corrección y de pureza del lenguaje. El autor dramático debe comenzar siempre por ser escritor. En el mismo teatro se ha puesto también en escena Los Prestamistas , comedia que adolece de todos los defectos de la anterior, pero que tiene condiciones li terarias que la hacen estimable, sin que por esto lo grase mejor resultado que El Trabajo. Ambas comedias han sido verdaderos trabajos per didos. En el teatro de Jovellanos se han puesto en escena en el mes de enero El Honor de una mujer , obra que revela falta de meditación de su autor, que en otros trabajos ha logrado aplausos merecidos y que , con sus condiciones naturales, solo necesita estudio detenido de los planes para llegar á ocupar el distinguido puesto que le está reservado. La Herencia del pecado , drama de los señores Nogués y Benisia, se salvó verdaderamente por su elegan te y, por lo general , correcta versificación , empleada


REVISTA DRAMATICA.

desgraciadamente en un asunto de sobra conocido y No podia yo esperar que en el espacio de un mes erizado de escollos que sólo salva una grande esperienfuesen los teatros cíe Madrid tan fecundos en noveda cia del teatro, y un conocimiento profundo del corazón des, sí bien temía que, dada la fecundidad, no habían humano. La Herencia del pecado, á pesar del título, de ser los resultados tan lisonjeros como podemos ape es un drama inocente. tecer los verdaderos amantes de nuestras glorias lite En la misma noche se estrenó Calabacín VII, pieza en un acto que en París ha producido grandísimo efec rarias. Producir mucho y bueno en el terreno de mas difí to, v muchos miles de francos á los autores, y que, cil cultivo de las letras, es tan raro, como natural es trasladada á España, no lia podido resistirla por el fe que el frecuente anuncio de obras nuevas en los carte lizmente delicado gusto de nuestro público. El telón les, esté en razón inversa de los frutos recogidos por cayó sin acabarse la representación. Es preciso que los . autores y empresas teatrales. Estas, por otra parte, tie arregladores y simples traductores se convenzan de nen que luchar en el presente año, con un formidable que nada dicen los éxitos franceses. enemigo: el gran teatro político, en el que todos so Posteriormente se han representado con aplauso en mos actores, autores y empresarios*! la vez, y en el el mismo teatro los dos juguetes, origínales del inge que está , por lo tanto , reconcentrada toda la atención nioso poeta don Rafael García Santisteban, ¿República pública, que ve unidos estrechamente al interés del ó Monarquía?, y La libertad de enseñanza. Ningún gran drama, lus intereses mas sagrados de la nación. problema político vienen á resolver, y, como obras dra Dando lugar preferente al antiguo corral de la Pa- máticas, tampoco añaden nuevos títulos á los que ad checa, hoy teatro Español, debo también dedicar algu quiridos tiene ya el señor Santisteban de donoso y agu nas palabras mas de las que merecen las restantes obras do poeta cómico. El primero es una sucesión de escenas estrenadas, á El Juez de su causa, comedia anunciada entre un matrimonio y el simple gallego que les sirve primero en los periódicos con el titulo de La Luna de y al que mujer y marido toman por terreno de invero Sangre. El Juez de su causa es una imitación de símil ejercicio de sus principios en política, con apli nuestro inimitable teatro clásico, y su autor anónimo, caciones familiares, que ninguna trascendencia pueden ha querido tomar también del siglo de oro de las letras tener en sus resultados para las altas cuestiones que el españolas , el emb izo con que había de cubrirse , lla joven republicano y la señora monárquica tratan de mándose en los carteles «Un Ingenio de esta corte,» ventilar, aferrados respectivamente á su sistema. El pseudónimo con que se malvelaba el rey don Feli criado gallego representa allí, al parecer, el justo me pe IV, que se divertía en trazar y versificar comedias á dio, y en verdad que en las cosas que le ocurren se la sombra de Calderón, Hurtado de Mendoza y VUlai- muestra mas avisado y discreto que sus ¡nocentes amos. La libertad de enseñanza, de mas asunto é interés, zan, mientras á su real sombra, trazaba descabellados planes políticos su favorito Conde-Duque de Olivares. si bien esté fundado en falsa base, tiene también El Juez de su causa es en su asunto y en su plan mas condiciones de obra dramática y logra entretener como una inversión de los de la célebre comedia de mas á.los espectadores, aunque sin esas tiradas de ver Hojas, El Labrador mas honrado, García del Casta sos de circunstancias, con que los personajes de ¿Re ñar. Pero el autor de la imitación, no ha logrado dar pública ó Monarquías'/ arrancan aplausos políticos en á las situaciones ni á los caracteres de su obra aquel , sus discursos finales Un poco mas definido el colorido de los caracteres y interés, aquel colorido, aquella verdad y fuerza de vida que resaltan en las situaciones lógicas y caracte menos recargadas y prolongadas algunas escenas y el res magistralmente presentados por el inmortal autor éxito de La libertad de enseñanza hubiera sido com pleto, sin que por eso hubiera enseñado ni resuello de Entre bobos anda el juego. Donde la imitación es verdaderamente notable y en nada en la cuestión política. La simplicidad de carác lo que consiste el mérito real de la obra que me ocu- i ter de aquel pobre maestro a fortiori, que tan pronto aparece sucumbiendo á necias exigencias y caprichos pa, es en la forma. La versificación es siempre correcta , espontánea , y de su mujer, como aceptando con gusto un papel feo muchas veces brillante; las imágenes y pensamientos en la representación de una farsa infame , da lugar á en que abunda, son de notable belleza, y en las des veces á la duda de si aquel hombre es un tonto ó so cripciones, se echa de ver aquella naturalidad encan lemne bribón. Las consecuencias políticas que el autor tadora de nuestros grandes modelos, apareciendo estu quiere que se desprendan de la exposición de su dra diados con preferencia por el autor, sobre todo Rojas mático cuadrito, serían fatales para el principio de li bertad de enseñanza , que hoy es ya una ley. Por for y Tirso de Molina. En situaciones dadas, sin embargo, abusa con esceso tuna , tan noble principio y ley tan justa, no pueden del lirismo, y éste perjudica siempre á la verdad dra nunca ser origen de males que señala el festivo y sa mática, que exige sobriedad á toda costa, y que pre tírico poeta , que en ambos juguetes ha mostrado una senta como primer modelo del antiguo teatro al filó vez mas facilidad y gracia con que versifica y maneja sofo moralista y nunca bastante desagraviado autor de , el diálogo.

Me he detenido un poco mas al hablar de los jugueLas Paredes oyen, y La Verdad sospechosa.