Página:En el Mar Austral - Fray Mocho - Jose Seferino Alvarez.pdf/216

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida

214

EN EL MAR AUSTRÁL

caletas por insignificantes que sean, y poniéndoles autoridades... Esta es gente que sabe.

—Sin contar,—dijo Rana Blanca,—con el hormiguero de los Salesianos que tienen la olla en Chile y que ellos fomentan... Poco á poco, á pretexto de reducir indiadas que no existen y de religión y del diablo, se ván extendiendo por todo... Me dicen que ahora yá se han recostado al Rio Grande, allá en los lavaderos del finado Popper. Pronto aquí, uno no vá á trabajar sinó para los misioneros, que se chuparán todo con sus almacenes y sUs barracas.

Y mientras regresabamos al cútter, caminando á la lúz de la luna, que silenciosamente rielaba sobre el mar lejano, yo pensaba en la enorme responsabilidad de los hombres dirigentes de mi pátria, que pagándose de fórmulas y de cortesías, permitirán con su dejadéz, su imprevisión y su indolencia, que continúe tramitando en la conciencia del pueblo, que lo fallará en definitiva, echando un borrón sobre las generaciones actuales, el escandaloso proceso que yá se inicia á la lúz de todos los fogones que reflejan su llama temblorosa sobre las ondas movibles del mar austrál.