Página:Giner Mujeres America.djvu/160

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
158
P. GINER

tinguirte entre los mejores cazadores de nuestro pueblo. Soy la esposa de Milco, vengo á visitar á mi nieta y necesito hablarla á solas. Marcha y que en tu frente brille el triunfo concedido al valor y á la destreza.

»Obedecí los mandatos de aquella anciana, reuniéndome con algunos indios que me aguardaban cerca de mi morada. Provisto de un arco y veinte flechas, asistí á la cacería, que duró hasta que el sol desapareció en el ocaso, y habiendo tenido la fortuna de matar un gallardo antílope, corrí presuroso á ofrecerlo á mi amada. Una sonrisa hechicera fué la recompensa que obtuvieron mis afanes.

»Por la noche vino el venerable Milco acompañado de seis guerreros, para decirme que el plazo fijado con el objeto de saber mi determinación, acababa de espirar.

»—¿Qué resuelves?—dijo.

Pero como mi turbación me impidiese contestar prontamente, Popilea bajó la cabeza en señal de tristeza, y prorrumpió en amargo llanto. Entonces la anciana, demostrando en su semblante mucho enojo, díjome:

»>— ¿Intentas rechazar á mi nieta, deshonrándola á los ojos del pueblo? Todo lo que ha pasado, entre nosotros ha sido por tu causa, pues si no hubieras admitido en esta choza á la virgen que te hemos ofrecido, estaría ahora libre y sin la mancha que cubrirá su frente de