gal. Come mandioca, maíz, y caza y pesca, con un sencillo condimento.
Dedícase á las faenas agrícolas, en las cuales es diestra y perseverante.
Su distracción, su recreo favorito, por el que siente pasión irresistible, es la danza. Entre éstas, su preferida, es la llamada danza caducca. Entrégase á ella con ardimiento, adoptando posturas lascivas, ademanes y gestos de la más grotesca é intensa voluptuosidad.
La mujer del pueblo, envuélvese en amplio manto de paño negro y cubre su cabeza, indistintamente, con pañuelo ó sombrero negro también, adornado con plumas.
Viste con riqueza. trajes de seda de China, y se adorna con joyas.
Las brasileñas que habitan las elevadas montañas, son menos graciosas que las costeñas; pero, en cambio, distínguense por la blancura de su tez, sólo comparable con la del armiño.
Su carácter es frío y reflexivo, y su corazón, generoso y hospitalario.
Muestra gran afición al campo, en donde se expansiona, con la música y el baile.
Las oriundas de Portugal, son de regular estatura, color moreno claro y facciones correctas, cabello negro y sedoso, resultando, en su conjunto, elegantes y gallardas.
La mujer brasileña de la clase media y acomodada, es de alma vehemente y espíritu va