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LA CAMPAÑA

ban tambien en gran número los practicantes, que tanto habian escaseado al principio, y así pudo dotarse de este personal á las planas mayores de los cuerpos de ejército y á' los hospitales de Céuta; pero es sensible que la premura con que era preciso reclutarlos en Madrid y Sevilla, no permitiera asegurarse bien de la idoneidad de todos, á pesar de que se les sometia á un breve exámen; así que, á vuelta de aventajados alumnos de cuarto ó quinto año de la Facultad, que venian á África impulsados solo por su patriótico entusiasmo,se encontrába alguno que otro que jamás habia tomado una lanceta; nueva prueba de lo necesaria que es la organizacion de esta plana menor en tiempo de paz, si se la quiere tener buena en tiempo de guerra.

Tambien eran contínuas las remesas de material que iban llegando, las cuales se recibian en el parque de Sanidad que al cargo del primer médico D. Antonio Moreno Saajarjo, se estableció en el hospital del Rebellin. De allí se atendia á la reposicion del material de curacion de los cuerpos y brigadas; y como la esperiencia habia hecho ver que eran insuficientes las ocho camillas que tenia cada batallon, se distribuyeron dos más á cada uno de ellos.

Era verdaderamente prodigiosa la actividad con que se habia creado para esta campaña el material sanitario, de que tan escaso habia andado hasta entonces nuestro ejército, limitado á una camilla cualquiera y un mal botiquin por batallon.

Dos meses antes de inaugurarse la campaña, se habia instalado en el hospital Militar de Madrid el primer parque de Sanidad, al cargo del infatigable jefe D. Santiago Rodriguez, secundado por un oficial notable por sus conocimientos en el ramo de construccion de instrumentos quirúrgicos, é in