A los amigos y admiradores de Ferrer
Bajo el peso de solemne compromiso de honor, en cumplimiento de la última voluntad de un mártir dispuesto al sacrificio, y sintiendo sobre mi la mirada de cuantos en el mundo se agitaron constituyendo la gran solidaridad internaciomal del pensamiento libre en pro de Ferrer y de la enseñanza racionalista, salgo de mi modesta obscuridad, ocupo el puesto que se me ha designado y en él- me propongo continuar aquella obra redentora iniciada por Francisco Ferrer.
Lo que en aquél fué propósito espontáneo, producto de su inteligencia y de su energia perfectamente equilibradas, en mi es adopción y adaptación por acatamiento, por respeto, por admiración y por honra, y en ello pongo todo el empeño de mi voluntad.
Al entrar en posesión de la casa editorial
« Publicaciones de la Escuela Moderna », en virtud de la providencia dictada por el Tribunal