Página:La Ilíada de Homero, Tomo I (Ignacio García Malo).pdf/220

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
(114)

De espánto, y se retira ácia sus tropas
Para evitar la muerte, semejante
A un hombre temeroso que percibe
Una horrible Serpiente en la floresta,
Y temblando ácia trás vuelve sus pasos,
Cubierto de un palór mortal el rostro;
Asi asustado Páris á la vista
Del gran hijo de Atreo retrocede,
Y se oculta entre todos los Troyanos,
Para poder librarse de sus manos.
 Furioso Héctor al ver tanta flaqueza,
Le da aquestas terribles reprehensiones:
„¡Oh desgraciado Páris! vil cobarde,
„Que eres bueno tan solo en el semblante,
„Esclavo de mugeres, ó engañoso
„Pérfido seductor. ¡Pluguiese el Cielo
„Que nacido no hubieras, ó á lo menos
„Que hubieras perecido celibato!
„Para mí hubiera sido mayor dicha,
„Y para tí mas gloria , que no verte
„Siendo oprobio y vergüenza de los hombres.
„¡Cómo reirán los Griegos, que engañados
„De tu buena presencia te creían
„El defensor acerrimo de Troya,
„Quando vigor no tienes ni denuedo!