—«Muy bien.»
—«Nicanor B. es un individuo.... »
—«Diga: un cráneo.»
—«Vaya por el cráneo. Nicanor B. puede y sabe mentir porque es egoista; pero su personalidad no tiene, como el otro, los mismos vínculos con la benevolencia y con la veneracion; su amatividad es más animal; en el otro es más ideal; su astucia y su prudencia equilibran de un modo admirable la destructividad; pero por la inteligencia y el cálculo.»
—«¿No vé amigo cómo yo tenía razon al llamarle para que me estudiara esos cráneos? No me diga más por ahora.»
—«Es que.... »
—«Es que usted vá á entusiasmarse y á olvidar que los dos cráneos son de mujeres...»
—«Váyase al Infierno con sus cráneos de mujeres. Usted tiene la combatividad desarrollada como un Tigre, y por eso insiste en mortificarme con aquella afirmacion.»
—«Pero la mia es una combatividad ideal.»
—«Qué ideal, ni que música; es una idealidad de titeo.»
—«¿Y quiere algo más ideal? El titeador mas grande que ha habido fué Aristófanes, y sin embargo, usted sabe lo que de él dijo Platon ¿lo recuerda?»
—«Dijo que, desterradas un dia las Musas del
Parnaso, buscaron un asilo...