Quisola el padre casar
Con el conde; ella no quiso.
Propuso á Andres, dijo pares,
Pues pares á los dos hizo.
Propúsote á tí, mas viendo
Que eran tres los elegidos,
Dijo á esta pregunta nones.
Apretóla el viejecillo,
Dióla otra vuelta, y como ella
Tenia amor, y diz que es niño,
Sufrir no pudo el tormento,
Y confesó su delito.
Sentencióla el padre á muerte,
Rogóla con mil cariños;
Ella dijo: tijeretas,
Y el la respondió: cuchillos.
Enmedicóse á el padre;
Sangrarla primero quiso,
Y la dió una purga luego,
Con que vino á hacer lo mismo.
Púsose para tomarla
Antojos de haberte visto,
Con que se vino á quedar . . . . . .