Ir al contenido

Página:Noli me tángere (1903).pdf/30

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida

usted hace de mi padre, disipa mis dudas sobre su suerte, que yo, su hijo, ignoro aún .

Los ojos del anciano se llenaron de lágrimas, dió media vuelta y se alejó precipitadamente.

Vióse el joven solo en medio de la sala: el dueño de la casa había desaparecido, y no encontraba quién le presen tase á las señoritas, muchas de las cuales le miraban con interés . Después de vacilar algunos segundos, con una gracia sencilla y natural se dirigió a ellas:

—Permítenme ustedes,-dijo ,-que salte por encima de las reglas de una rigorosa etiqueta. Hace siete años que falto de mi país, y al volver a él , no puedo contener mi admiración y dejar de saludar a su más precioso adorno, á sus mujeres.

Como ninguna se atrevió a contestar, se vió al joven obligado á alejarse. Dirigióse al grupo de algunos caballeros, que al verle venir, formaron un semicirculo.

—¡Señores! — dijo; – hay en Alemania la costumbre de que cuando un desconocido viene a una reunion y no halle quién le presente a los demás, él mismo dice su nombre y se presenta, a lo que contestan los otros de igual manera. Permítanme ustedes este uso, no por introducir costumbres extranjeras, que las nuestras son muy bellas también, sino porque me veo obligado a ello. He saludado ya al cielo y a las mujeres de mi patria: ahora quiero saludar a los ciudadanos , a mis compatriotas. ¡Señores, yo me llamo Juan Crisóstomo Ibarra y Magsalin!

Los otros dieron sus nombres más o menos insignificantes, más o menos desconocidos.

—¡Yo me llamo A...a! -dijo un joven secamente é inclinándose apenas.

—¿Tendré acaso el honor de hablar con el poeta, cuyas obras han mantenido mi entusiasmo por mi patria? Me han dicho que ya no escribe usted, pero no han sabido darme el por qué.

—¿El por qué? Porque no se invoca a la inspiración para que se arrastre y mienta. A uno le han formado causa por haber puesto en verso una verdad de Pedro Grullo. A mi me han llamado poeta , pero no me llamarán loco.

—¿Y se puede saber qué verdad era esa?

—Dijo que el hijo del león era también león ; por poco no va desterrado.