diferentes actas en que aparece Mirón no sólo revestido de los títulos de conde y marqués, sino ejerciendo actos gubernativos en nuestro condado. La ignorancia en que nos hallamos acerca de la historia interior de aquellos remotos siglos, nos impide ver más claro en ciertos hechos anómalos é inexplicables, sin que nos sea lícito desecharlos cuando se hallan debidamente establecidos. Termina el importantísimo capítulo del condado de Sunyer con lo relativo á su último hijo y á sus dos hijas.
Habiéndonos ya desembarazado de las malezas que obstruían la entrada de la historia condal, no seguiremos á nuestro insigne indagador en su viaje por los tiempos sucesivos, en que las dificultades, que todavía se ofrecen, son sin embargo menores, y en que sería bien difícil resumir lo que se halla expresado con irreductible concisión; cuando por otra parte ninguna objeción se ha hecho, que sepamos, á sus innumerables decisiones acerca de los puntos más señalados de la historia de todos los individuos de nuestra familia soberana, es decir, nacimientos, enlaces y muertes [1]. A más de la constante solidez y exactitud de sus asertos, cabe señalar un gran número de materias, algunas de grande importancia, en que descubrió, rectificó ó aclaró; entre las cuales nos contentaremos con recordar las siguientes, algunas notadas ya por Lista:
La distinción entre el mencionado Ermengaudo ó Armengol hijo de Sunyer, y su sobrino Armengol conde de Urgel llamado el cordobés por haber perecido
- ↑ Un solo punto parece no resuelto todavía y es relativo á D. Pedro, segundo hijo del último Ramón Berenguer, que Bofarull supone con Zurita muerto muy joven, pero que no sin motivo los historiadores del Langüedoc creen ser el Berenguer Ramón que sucedió al primo y tutor del rey Alfonso, que los Anales de S. Víctor (V. Marca) acordes con el Gesta Comitum dan por asesinado en 1181, y que el insigne analista aragonés sustituyó, no se sabe porqué, por un Baucio.