Página:Obras de los moralistas griegos. Marco Aurelio-Teofrasto-Epicteto-Cebes (1888).pdf/12

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
X
MORALISTAS GRIEGOS.

dio con los dictámenes de la recta razón, única regla para discernir lo verdadero de lo falso, como dimanada de la verdad eterna, que decide lo justo é injusto.

Consiguiente á este principio, sólo deben llamarse con propiedad filósofos los que más se acercaren á explicar é ilustrar las verdades que la luz natural inspiró á los hombres, graduándose la perfección de las máximas morales por la mayor ó menor conformidad con la religión verdadera, fuera de la cual no se halla moral que merezca el nombre de perfecta, ni filosofía á quien pueda aplicarse aquella definición que Aristóteles hace de ella llamándola arte de artes y ciencia de ciencias.

Por más que se ignore cuál fuese la filosofía de los antiguos en los tiempos primitivos, no obstante, puede asegurarse con algún fundamento que la contemplación de la Naturaleza y de cuanto encierra en si ó produce de más admirable, ocupaba la atención de los primeros filósofos, y era su objeto principal, hasta que Sócrates, sin separarse de este camino, descubrió otro más recóndito é intrincado, pero no por eso menos seguro é interesante al hombre; como que se dirige á ponerle en estado de discernir el vicio de la virtud y conocer la diferencia entre las cosas buenas y malas en línea moral.

Sócrates, según la opinión más fundada, no dejó escrito alguno en el cual subsistan aquellas máximas que había juzgado conducentes á la corrección de las costumbres del género humano; y con todo, la posteridad no consintió que tan acendrada doctrina fuese sepultada en el olvido, habiendo quedado por fieles depositarios una multitud de