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M. AURELIO.—SOLILOQUIOS.

flexión madura y gravedad respetable[1], de modo que sin ostentación[2] pueda también persuadir lo mismo á otro.

Hice algún beneficio en pro de la sociedad? Pues ya con eso estoy premiado[3]. Procura siempre tener á mano esta consideración, y no dejes de ejercitarte en ellabernándose por los clamores del vulgo, como lo da á entender en este lugar, repitiendo los ecos del pueblo pagano, que no gritaba otra cosa, sino que la constancia cristiana en el martirio era una terquedad é insania : así nos lo refiere Tertuliano ad Nation., lib. 1, cap. XVII, XVIII y xix. No necesita la gloria de nuestros mártires que se les haga la apología contra un Emperador g-ntil, puesto que no hay cordura mayor que que la gracia de todo un Dios, caya fe confirmada con tanto prodigio confesaban, conociendo ser debido el que ellos consagrasen á la gloria del Salvador la vida que debian á la Naturalezn, y teniendo bien presente aquel precepto expreso de no temer á quien puede privarnos de la vida corporal, sino sólo á quien puede perder cuerpo y alma en la otra vida. Es cuerdo quien muere por el bien caduco de la patria, cuando ésta lo manda; ¿y será necio, imprudente y temerario quien se deja sacrificar por el bien eterno de su alma cuando Dios lo ordena?[1] Puntualmente esta gravedad era la virtud característica de nuestros mártires, los cuales no por pasión ó capricho se precipitaban al martirio, sino que compelidos de la fuerza tiránica no la huían cobardemente. Esta acción valerosa, que en un soldado muerto en el asalto de una trinchera se llamaría y reputaría por un efecto de la fortaleza más constante y prudente, ¿por qué en un mártir cristiano no mereeerá igual calificación?[2] M. Aurelio podía haber añadido: como se suele ver en un filósofo que corre á la muerte, convocando la gente de antemano á que contemple la pira que él mismo se habia erigido, como lo hizo Calano el gimnosofista y después Peregrino el cínico.

[3] La razón es, porque Benefacit sibi ipsi vir beneficus8.

Prov., cap. XI, v. 17.

firme resolución de perder antes la vida


  1. 1,0 1,1
  2. 2,0 2,1
  3. 3,0 3,1