VII
Arriba pensadores! que en la lucha Se templa y fortalece Vuestra raza inmortal, nunca domada, Que lleva por celeste distintivo La chispa de la audacia en la mirada Y anhelos infinitos en el alma. En cuya frente altiva Se confunden y enlazan El laurel rumoroso de la gloria Y del dolor la mustia siempre-viva!
Arriba pensadores!
Que el espíritu humano sale ileso
Del cadalso y la hoguera!
Vuestro heraldo triunfal es el progreso
Y la verdad la suspirada meta
De vuestro afan jigante.
Arriba! que ya asoma el claro dia
En que el error y el fanatismo espiren
Con doliente y confuso clamoreo!
Ave de esa alborada es el poeta,
Hermano de las águilas del Cáucaso,
Que secaron piadosas con sus alas
La ensangrentada faz de Prometeo!
Olegario V. Andrade