temala; al siguiente año de 1578 recibió á las primeras monjas que, procedentes de Mexico, fundaron el convento de la Concepción de aquella ciudad; pasó después á España, y deseoso de poseer la imagen de la Virgen de Loret de la villa de Alcántara, de que era muy devoto, la robó de acuerdo con el sacristán, á quien sedujo por dinero, y la llevó á Veracruz, después de salvarse de una tempestad, y luego á Mexico y á Guatemala; en 1584 y 1592 volvió á ser alcalde de esta capital, y teniendo necesidad de trasladarse al Perú á recoger la herencia de un pariente, dejó la imagen en depósito á D. Pedro Marín de Solorzano; y éste, al saber la muerte de Cabrillo, la entregó al venerable varón Fr. Pedro de Arboleda.
Rodríguez de Fonseca (D. Juan), págs. 84, I; 113, II.—Obispo de Palencia y de Burgos, primer Presidente del Consejo de Indias, que gobernó en Sevilla lo que tocaba al despacho de flotas y armadas hasta que el Rey Católico le llamó para que presidiese en la corte los negociados de Indias, y desempeñó este cargo hasta que el Emperador Carlos V dispuso que el doctor Mercurino Gatinara, su gran chanciller, fuese superintendente de todos los Consejos. Fonseca por favorecer á Diego de Velázquez se manifestó muy contrario á los intereses de Hernán Cortés.
Rodríguez Picón (Cristóbal), pág, 97, I.—Conquistador de Guatemala con D. Pedro de Alvarado.
Rojas (Diego de), págs. 95, 126, I.—Conquistador de Guatemala con D. Pedro de Alvarado, quien le nombró alcalde ordinario el 25 de julio de 1524 y desempeñó este cargo hasta el 8 de enero de 1525; en 30 de enero de 1526 fué elegido primer alcalde, y al regresar Alvarado de Honduras y prepararse para ir á ver á Cortés en Mexico, nombró, en lugar de Rojas, al que equivocadamente se le apellida Becerra (pág. 187 de este tomo), primer alcalde á D. Pedro Portocarrero con fecha de agosto del mismo año. Rojas pasó al Perú en 1534 y contribuyó á la conquista de aquel reino.