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Página:Recordacion Florida Tomo II.pdf/63

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52 Biblioteca de los Americanistas.

los españoles y demás ladinos, cultiva espiritualmente como viña fructífera de la Iglesia católica el vigilante celo y atento religioso cuidado de los primitivos pastores dominicanos, con cuyo cultivo esmerado y pío se ven producir frutos de estimable cosecha y granazón cristiana; viéndose hoy erigido á gloria de Dios nuestro Señor, dueño de este rebaño, un suntuoso y magnífico templo enriquecido y adornado de ricas y maravillosas preseas, de ornamentos aventajados por la materia y arte, con lámparas, cálices, vinajeras, custodias, cruces de plata, con otras alhajas de sacristía y buenas campanas y órgano. Donación toda de estos indios católicos, y entre ellos especialmente Baltasar Rey, indio favorecido y alentado de la fortuna, ó lo cierto, de aquella divina y altísima Providencia que adoramos, con colmados y abundantes bienes temporales, que supo retribuir reconocido á Dios, no dejando exhaustos á sus hijos que gozan con su muerte ricas y excelentes porciones hereditarias. Todas las demás iglesias del valle, de los pueblos que quedan referidos, están ilustremente adornadas de ricas alhajas y preseas excelentes.

Y habiendo de haber dicho en lo que se describió notable y maravilloso del pueblo de Amatitlán, donde era su legítimo y propio lugar, se dirá en éste lo que se defraudó por olvido en aquél. Porque en el mercado ó tianguiz de este de Mixco, se halla la fruta que es conocida con nombre de granadilla del Perú, porque debió de venir á éste de aquel reino, y se conduce á la plaza de Mixco de los pueblos de Amatitlán y Pinula, donde ella se produce y cría en un bejuco que trepa y se levanta enredando á los árboles más descollados, á la manera y con la propia semejanza de hojas que hace y viste lozanamente la hiedra. Pero no está lo maravilloso de esta planta en su fruto, sino en lo singular y admirable de sus misteriosas y agradables flores, porque siendo su talla y formación á la semejanza y hechura de una corona, ésta se esmalta de cárdeno sobre cándido y blanquecino país. Señala en la breve acompasada circunvalación de su esfera las sacrosantas venerables insignias de la pasión do-