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a] A las oraciones principales a/irmativas, se aplica todo lo expuesto en C acerca de la construcción re- gular en las oraciones en general, con el agregado de que en ellas exige dicha construcción que el sujeto vaya antepuesto al atributo. Ejemplo: El presidente de la' Junta, Don Cornelio Saavedra, había sido reves- tido de los mismos honores del virrey. (ALBERDI)
“b] Las oraciones principales negativas, se constru- yen regularmente como las afirmativas, con la única diferencia de anteponer al verbo, el necesario com- plemento circustancial de negación. Ejemplo: Los unitarios | no han representado un mal principio. (AL.- BERDI, LB. 124.)
c] En cuanto a las oraciones principales ¿nterroga- tivas, si las reducimos a su forma más simple, se construirán regularmente con sólo anteponer el verbo al sujeto. Ejemplos: ¿Soy yo el aludido? (afirmativa: Yo soy el aludido). ¿Trabajan los albañiles? (afirma- tiva: Los albañiles trabajan ). ¿Sois vosotros los recién llegados? (afirmativa: vosotros sois los recién llegados).
Adviértase que en la generalidad de los casos, basta la entonación interrogativa: ¿Yo soy el aludido? ¿Los albañiles trabajan? ¿Vosotros sois los recién lle- gados?
d] En las oraciones principales exc/lamativas, cuan- do el término inicial es qué u otro equivalente, la construcción regular pide en seguida lo que provoca la admiración, luego el verbo y después el sujeto, sin alterar la colocación de las demás partes. Ejem- plos: ¡con qué ardor construyen trincheras los solda- dos ! (afirmativa: Los soldados construyen trincheras
