Página:Sub Terra.pdf/90

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
88
EL PAGO

ahora abrasaba su carne como si fuera plomo derretido.

Sin embargo, no cejaba con su tenaz empeño i miéntras el carbon se desmoronaba amontonándose entre sus piernas, sus ojos buscaban el sitio propicio para herir aquel muro que agujereaba hacia ya tantos años, que era siempre el mismo, de un espesor tan enorme que nunca se le veia el fin...

Pedro Maria abandonó la faena al anochecer i, tomando su lámpara i arrastrándose penosamente por los corredores, ganó la galeria central. Las corrientes de aire que encontraba al paso habian enfriado su cuerpo i caminaba quebrantado i dolorido, vacilante sobre sus piernas entorpecidas por tantas horas de forzada inmovilidad...

Cuando se encontró afuera sobre la plataforma, un soplo helado le azotó el rostro i sin detenerse, con paso rápido descendió por la carretera. Sobre su cabeza grandes masas de nubes oscuras corrian empujadas