primera vez fueron pacificados), otras dos veces, y ha habido bien que hacer en diferentes ocasiones, para reducirlos y volverlos á pacificar.
El traje, y vestido destos naturales de Luzon, antes que los Españoles entraran en la tierra, comunmente eran: los varones, unas ropillas de cangan, sin cuello, cosidas por delante, con mangas cortas, poco mas de la cintura, unas azules y otras negras, y algunas coloradas en los principales, que las llaman chininas[1], y una manta de color, revuelta á la cintura, y entre las piernas, hasta cubrir sus partes vergonzosas; y á medio muslo que llaman bahaques[2], la pierna desnuda, y el pié descalzo, y la cabeza sin cubrir, revuelto á ella un paño angosto, con que aprietan la frente y las sienes, llamado potong[3]. Al cuello, vueltas de cadenas de oro, labradas como cera hilada, y de eslabones á nuestra usanza, unas mas gruesas que otras. En los brazos, muñequeras (que llaman calombigas) de oro labradas, muy gruesas de diferentes hechuras, y algunos con sartas de piedras, cornerinas y de ága-
- ↑ Ignoramos el origen de esta palabra, que no nos parece se derive de China. Si nos fuera permitido hacer una conjetura, diríamos que tal vez una mala trascripción fonética haya hecho chinina la palabra tininã (de tinã) que en tagalo significa teñido, nombre de esta prenda de vestir, monocroma casi siempre, lo que indicaría su origen. Los principales la usaban de color rojo, y la tela era «gasa fina de la India» según Colin. Esta afición al color rojo, que encontramos ya entre los Romanos, subsiste aun entre las tribus bárbaras de Mindanaw.
- ↑ Bahag «Rica manta de color, y muy de ordinario listada de oro», entre los principales.
- ↑ «Ceñíanle de diferentes maneras, ya á lo moro como turbante sin bonete, ya retorcido y revuelto á modo de toquilla de sombrero. Los que se preciaban de valientes dejaban caer sobre las espaldas los cabos del paño muy labrados, y tan cumplidos que llegaban hasta las corvas. Y en los colores del paño hacían ostentación de su Principado y divisa de sus empresas y hazañas; no siendo lícito á nadie usar del Potong colorado hasta haber muerto por lo menos á uno. Y para traerle listado de ciertas listas, que eran como corona, habían de haber muerto á siete.» (Colin lib. I. 59). Aun ahora se ve alguno que otro Indio usar el balindang á modo de putong. Putong significa en tagalo coronar, poner una cosa sobre la cabeza rodeándola.