Ir al contenido

Página:Sucesos de las islas Filipinas por el doctor Antonio de Morga (edición de José Rizal).djvu/364

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
— 318 —

tres, con cubos y traveses á trechos[1]; tiene una fortaleza de sillería, á la punta que guarda la barra, y el río con un rebellin junto al agua, que tiene algunas piezas gruesas de artillería, que juegan á la mar y al río, y otras en lo alto, para defensa de la barra, sin otras medianas de campaña, y pedreros, con sus bóvedas, para bastimentos y municiones, y un almacen de la pólvora muy guardado, su plaza dentro, con pozo copioso de agua dulce; alojamientos de soldados y artilleros, y casa de alcayde. Está fortificada de nuevo, por la parte de tierra á la plaza de armas, donde tiene la entrada, con una buena muralla, y dos orejones guarnecidos de artillería, que juega cortando la muralla y puerta; tiene esta fortaleza, llamada Santiago, una escuadra de treinta soldados con sus oficiales, y ocho artilleros que guardan la puerta, y entrada por sus cuartos, á cargo de un alcayde que vive dentro, y la tiene su guardia, y custodia.

Otra fortaleza, asímismo de piedra, hay en la misma muralla, á tiro de culebrina, al campo del lienzo, que corre por la marina de la bahía, que se llama Nuestra Señora de Guía; es un cubo muy grande, redondo con su patio, agua, y alojamientos, y almacenes dentro y otras oficinas, con un traves, que sale á la marina, en que hay una docena de piezas grandes y medianas, que juegan á la bahía, y barren la muralla, que corre por ella hasta la puerta y fuerte de Santiago; á esotra parte tiene un orejon grande, con cuatro piezas gruesas, que juegan la marina adelante, hácia la ermita de Nuestra Señora de Guía; la puerta y entrada es por dentro de la ciudad, guardada con una escuadra de veinte soldados, con sus oficiales y seis artilleros, un alcayde con su teniente, que moran dentro.

  1. Entonces no tenía aún fosos. Éstos se cavaron después de la invasión inglesa de 1762. Las murallas fueron reformándose también y perfeccionando con el trascurso del tiempo y las necesidades en que la ciudad se vió.