También dan arroz, bastimentos de todo género, por precios que entre estos Naturales valen y pasan, que siempre son muy moderados, y los datos, vilangos, y fiscales los reparten, cogen y sacan de los Naturales, y de la misma manera proveen á sus encomenderos, cuando van á las cobranzas.
El mayor servicio, con que acuden estos Naturales, es, en ocasiones de la guerra, dando remeros y esquifazones para los vireyes, y navíos que van á las jornadas, y gastadores, para lo que mas se ofrece, en el discurso de la guerra, aunque se les paga su sueldo y jornal.
De la misma manera dan y reparten Naturales, para las obras del rey, como son fábricas de navios, cortes de madera, maestranza de la jarcia[1], y de la casa de la fundicion de la artillería, y servicio de los almacenes, pagándoles su estipendio y jornal.
Á lo demas, que es servicio de Españoles, y sus navegaciones, obras y cualquier otro servicio, que los Naturales hacen, es voluntario, y por su paga y concierto; porque, como hasta agora los Españoles no benefician minas, ni han dado en granjerías de labores del campo, no hay que ocuparlos en nada desto.
Los Españoles que hay en las islas Filipinas, residen la mayor parte en la ciudad de Manila, donde está la cabeza del reyno, y el trato y comercio principal, y algunos encomenderos de sus provincias y comarcas, y otros en las ciudades de Segovia, Cáceres, y el santísimo nombre de JESVS, en Sebú, y en la villa de Arévalo, donde están poblados, y los mas tienen sus encomiendas.
- ↑ Taal era uno de los pueblos en donde más jarcias se fabricaban para los navíos reales.
salario dado por el lego director de las obras del hospital. Con todo, aunque este edificio no ha albergado ni ha servido para otra cosa más que para enriquecer ciertos bolsillos ya ricos, y empobrecer á los pobres, preferimos sin embargo la manipulación del lego á la de los ciertos oficiales de la guardia civil, que cogen gente pacífica para hacer limpiar gratis sus sucias viviendas.