Juntamente asiste á la audiencia real, como presidente della, en todo lo que le toca, en la cual hay cuatro oidores, y un fiscal, con cada dos mil pesos de minas de salario al año[1], un relator y un escribano de cámara, alguacil mayor, con sus tenientes y alcaide de la carcel de corte, chanciller, y registro, dos porteros, un capellan y sacristan, verdugo, procuradores y recetores; conoce de todas las causas civiles y criminales, que á ella ocurren de todas las provincias de su distrito; que con las islas Filipinas, y la tierra firme de la China descubierta y por descubrir, con el mismo poder que las Chancillerías de Valladolid y Granada en España; y juntamente, se provee en el audiencia lo que conviene para la buena administracion, cuenta y razon de la hacienda real.
La caja de la real hacienda de su Magestad en las islas Filipinas y su tribunal, es de tres oficiales reales que su Magestad provee, factor, contador y tesorero, con cada quinientos y diez mil maravedis de salario por año, con su escribano de minas, y registros de la real hacienda, ejecutores y oficiales, que residen en Manila, desde donde administran y despachan todo lo que pertenece á la hacienda real, de todas las islas[2].
Tiene su Magestad en su real corona, en las islas Filipinas, cantidad de encomiendas, en todas las provincias de las Filipinas, que se cobran en su real caja, por mano de sus oficiales reales, y cobradores que á ello despachan; que un año con otro, montan treinta mil pesos, quitas costas y gastos[3].
- ↑ Los oidores son ocho ahora y su sueldo ha subido también á 4,700 pesos, siendo 5,500 el del Fiscal.
- ↑ En el ramo de Hacienda los cambios y provechos han sido desde entonces tales que si tuviéramos que ocuparnos de los sueldos del servicio, saldríamos de los límites de comentadores. Bástanos decir, para dar una idea de ello, que en los presupuestos del año de 1888 llegaban á 2.278.625 pesos.
- ↑ Los tributos (cédulas personales) de los Indios en Filipinas dan hoy día más de 4.000,000 de pesos.