50 POLÍTICA DOMÉSTICA
conciencia del deber, satisfecha por un proceder jui- ciosamente conforme con las circunstancias.
Y si las de su matrimonio dan á la joven ca- sada los medios de sostener un tren de casa más considerable que aquel á que estaba habituada cuan— do era célibe, y le permiten disfrutar de comodidades compatibles con la nueva situación en que se halla, entonces una parsimonia que reduzca los gastos á una cifra demasiado inferior á la de los recureos de la casa, será muestra de un espíritu mezquino.
La recién casada debe cumplir muy cuidadosamen- te con las obligaciones que su nueva posición social le impone.
Desde que sale del hogar paterno, contrae otras relaciones de parentesco y amistad, y necesita conci- liarse el afecto y la consideración de todos, procuran- do al mismo tiempo conservar el cariño de su propia familia y la estimación de sus antiguas amistades; todo esto sin olvidar la posibilidad de llegar á tener hijos, para quienes ha de ser modelo y guía.
La paz doméstica de un matrimonio joven puede verse alterada por pequeñas envidias que ocasionan frialdad entre dos familias, turban diariamente la