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SIGUE NOTA (1) DE LA PÁJ 194, DIA 1.° DE FEBRERO DE 1791

    es cubierta de nieve perpétua hasta un poco mas abajo de su tercio superior. Desde el lago i llano se le ve enteramente aislado, ostentando plenamente su carácter de volcan por esta situacion aislada, su ascenso repentino, aunque de inclinacion comparativamente suave, i por su figura de cono. A su espalda está unido por un yugo o paso con el cerro la Picada de formacion enteramente distinta, que es de sienita o sea una variedad de granito. Este paso es notable por marcar el contacto, poco estudiado hasta ahora, de la formacion plútonica antigua, con la volcánica i la union del volcan Osorno, que se halla aislado por los demas lados, con el cordon lateral e indirectamente con el centro de la Cordillera. Esta configuracion fué reconocida ya en 1852 por el Dr. R A. Philipi en su espedicion al volcan Osorno, con la que inauguró en Chile su tan larga i tan sumamente provechosa carrera científica [n 1]. El paso de la Picada, aunque situado casi al fin del cordon es bastante alto, lo mismo que la mayoria de los otros pasos ausiliares. Es usado por los colonos de la ribera norte del lago Llanquihue para ir al Todos los Santos.
    El cerro de la Picada se junta al cerro Puntiagudo. El cordon formado por los tres cerros nombrados continua al NE hasta rematar en el cerro Pantoja, no siendo conocida todavia esta última parte de su curso que cierra la hoya del rio Steffen. El Pantoja es un macizo de la cadena central de la Cordillera; su vértice marca la cumbre de esta montaña.
    Este cordon, que acabamos de trazar, desde su fin hasta su oríjen, es el prototipo de un cordon lateral de la Cordillera de la rejion austral. Su estructura es diferente de los cordones laterales de la Cordillera del centro i norte de Chile i es el criterio característico que distingue la pendiente occidental de la Cordillera austral.
    Esta configuracion orográfica es realmente fenomenal por su carácter constante i por su vasta estension. No podemos ménos de señalarla como un tipo especial de la mayor importancia científica. Presumimos que tiene analojía con la de otras rejiones del tipo pacífico glacial de costas, como por ejemplo con el alto cordon que se destaca del pié occidental de las Montañas Rocosas, que representan la cadena central de la Cordillera de los Andes, i termina, súbitamente al borde del Pacifico en el jigantesco volcan de San Elias. El aspecto jeolójico de aquella configuracion no es ménos notable: por una parte las erupciones colosales de los volcanes i por otra la acumulncion de capas mui altas i sumamente estensas de hielo sobre el territorio, durante la época glacial, han juntado su accion para labrar esos cordones de formas i dimensiones tan especiales.
    Si nos fuera lícito deducir una regla jeneral para la estructura de las costas de latitud avanzada en ambos hemisferios, señalaríamos como la causa eficiente de ella la aparicion en el borde de la Cordillera las erup-


  1. Espedicion al volcan de Osorno, con mapa, "Anales" 1852, p. 107.