Página:Viajes de Fray Francisco Menéndez a Nahuelhuapi.pdf/219

De Wikisource, la biblioteca libre.
Ir a la navegación Ir a la búsqueda
Esta página ha sido corregida
— 206 —

la noche, y por la mañana seguimos todos otra vuelta de la cordillera y fuimos a dar en una eminencia, que no podimos pasar, en donde tomamos la vuelta para el otro lado a rebuscar otra cordillera, a ver si tenia pase: la caminamos dos dias pasando como se podia entre los tres, y encontramos un tajamar que no podimos pasar adelante, y nos retiramos por nuestro camino en busca de los seis compañeros, que se apartaron de nosotros en dicho rio, que nosotros cogimos primero la marcha para pasar dicho rio, y ellos se quedaron atras: hasta lo presente no sabemos si pasaron adelante o si fueron para bajo en busca del Padre = Desde el viernes por la tarde dejaronme sin comer a mí, y a mis compañeros, y hemos tomado retiro para abajo, y siempre buscando, lo que dejamos a la ida. El jueves a la tarde hemos encontrado un pase, y si el Padre le parece lo registraremos hasta su fin, por lo que hago este propio, para ver lo que el Padre manda sobre este asunto. Quedo esperando respuesta, y para registrarlo necesito de bastimentos. porque estamos con tanta dieta, que ha veinte y cuatro horas tomamos un poquito de arina, y esta ya no ay, y tambien quatro mozos de refresco para abrir el camino con sus cuchillos, que los seis, sino han bajado, estoi pronto a la hora que vengan mandarlos a la playa. Esto ha de ser pronto. Interin merezco la respuesta, quedo rogando a Dios le guee ms. as. en la montaña de Vuriloche y Febrero once de mil setecientos noventa y uno.—Pablo Tellez.—R. P. Fr. Franco. Menendez [1].

No obstante que esta carta nos dejó suspensos y sin poder hablar, determinamos seguir viage para juntarnos con ellos, y entre todos consultar lo que se havia de hacer, y registrar la abra, y en caso de no hallar pase, ir a la Laguna de todos San-


  1. Palpamos aquí la enormes dificultades que se oponen al descubrimiento del camino. Los pocos rastros visibles del antiguo camino ya quedaron atras; ni Menendez ni su ayudante Tellez poseian datos positivos sobre su direccion. Es probable que no tenian tampoco suficiente práctica en el método de hallar el paso en el caso de que no se presentara en su forma típica i sencilla, como sucedia efectivamente. Por eso vemos ahora a Tellez i luego tambien a Menendez proceder de un modo empírico i buscar el camino por diferentes lados, rejistrando cada quebrada que prometia una salida al Este.