esperar que se acabasen de moler las harinas estubimos en este partido hasta el dia diez y siete, en donde tomé un maestro piraguero [1] y dos peones mas. Tomamos el rumbo para nuestro destino y llegamos a Nahuelhuapi el dia diez y ocho de Febrero. En la Laguna de todos Santos se lebantó una pirahua de diez y seis varas. El P.e Valle tambien cayó enfermo de ahogos [2] y desde alli le remití a Callvuco con siete hombres. Todo coadyubó para tardar tanto, porque los que quedaron condujeron todo el bastimento. Los que fueron a llebar al P.e Valle a Callvuco llegaron a Nahuelhuapi el dia diez y nuebe, y dicen, que el P.e Valle llegó a Callvuco algo aliviado.
En Nahuelhuapi se hizo una pirahua de diez y ocho varas [3], y aunque costó bastante trabajo el abrir los robles, el dia veinte y siete nos embarcamos en las dos pirahuas, y con viento en popa llegamos en siete horas y media cerca del desagüe de la laguna, al lugar que en el viage pasado nos señalaron para to-
- ↑ El arte de la construccion de las piraguas se habia perfeccionado notablemente hácia el fin del siglo, de modo que habia dado oríjen a la nueva profesion de constructores dedicados especialmente a ella. Segun relatamos antes, hemos alcanzado a conocer a un maestro de ese oficio estinguido, pudiendo informarnos por él de algunos puntos esenciales de su fabricacion.
- ↑ El término provincial de Chiloé "los ahogos" indica la enfermedad conocida en la ciencia bajo el nombre "asma con enfisema". Esta enfermedad, que privó a Menendez en este viaje de la compañia de su modesto i fiel colega, es comun en Chiloé; el clima húmedo i frio de esta comarca i de toda la pendiente occidental de la Cordillera austral dispone indudablemente a ella.
- ↑ Esta piragua, una construccion mui notable por su gran tamaño, es la misma que hallé guardada, aunque casi del todo derruida, en la playa de Puerto Blest i de la que conservo un fragmento. El autor señala las dificultades que hubo que vencer en su fabricacion; otra de ellas consistiria en hallar árboles suficientemente largos i corpulentos para los grandes tablones de una sola pieza. Me he referido ántes a este lejendaria embarcacion; véase e. l. t. II, p. 236.
órdenes del virei (artº 2); todo manifestaba el entusiasmo que reinaba en la provincia por la prosecucion de los descubrimientos de ultra-cordillera.
Como consecuencia de estos arreglos diferentes se hizo forzoso despachar la espedicion de San Cárlos, en lugar de Castro, de donde habian salido todas las anteriores.