Página:Viajes de Fray Francisco Menéndez a Nahuelhuapi.pdf/420

De Wikisource, la biblioteca libre.
Ir a la navegación Ir a la búsqueda
Esta página ha sido corregida
— 411 —

era el que havia estado en el sur con los espaiioles. Comenzó a hablar Mancduvunay y los otros callaron; solo hablaron en la lengua que no entendiamos. Luego llegó una India no mui vieja con dos muchachas y lo primero que habló fué en castellano: esta nos dijo que la carta vendria dentro de dos dias. Luego se marchó Mancúuvunay, y quedando los tres Indios y las Indias comenzaron a hablar no solo en lengua chilena, sino en castellano, aunque poco. La India nos dijo que la carta pedia aguardiente, yerba, azúcar etc. Quiso la fortuna que tenia un poco de yerba y se la di [1]. Todos se quedaron a dormir y con esta ocasion se trató con el Indio mas despacio. Se mantuvo en


    rio Negro estaba cerrado por los indios. Encontraremos mas adelante en el "Apendice" citado una variante importante de esta relacion.

    De esca manera Menendez iba recibiendo cada vez mas datos, bien que indirectos, de sus paisanos del Atlántico.

  1. No seria imposible que esta india fuera "la lenguaraza Teresa", que hizo un papel importante en la espedicion de Villarino como su confidente intrusa. Hemos relatado su historia en el lugar correspondiente.

    Recordemos que esta se embarcó con él, llevando a su hija a El Cármen; ahora volveria quizás con otra hija mas, que se le acrecentara durante los once años trascurridos. La india, que se presentó a Menendez, sea que fuera la misma o que fuera otra, hablaba algo de español i estaba al cabo de la venida de la carta, lo que prueba que venia desde el Cármen, probablemente con el cacique Chulilaquin, el portador de ella; ella servia ahora a éste en calidad de mensajera confidencial i a la vez de espia [n 1].

    La candorosa interpretacion, dada por esta india al contenido de la carta, es mui orijinal i demuestra a las claras la índole infantil del jenio de los indios, que hemos señalado ántes.

    Parece que la provision de los víveres i pertrechos destinados a este viaje no fué tan abundante i variada como la del anterior i que el ramo de los agasajos se habia descuidado, ya que las chaquiras ofrecidas la última vez habian sido recibidas con desprecio. Vemos que faltaban en el inventario de Menendez articulos mui apetecidos por los indios como el aguardiente, el azúcar i la yerba mate, que eran mas o ménos corrientes en el Atlántico, pero escaseaban en la lejana i pobre provincia de Chiloé.


  1. No hemos resistido la tentacion de identificar en lo posible las personas, que aparezcan en nuestra historia, con otras ya conocidas. Es demasiado natural el deseo de imponernos de los detalles biográficos de las personas que nos interesen de alguna manera por sus riisvos de orijinalidad. Apelamos a la induljencia, del benévolo lector en caso de que los ensayos hechos en este sentido no merezcan su aprobacion.