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A mi me destinó la obediencia a la Mision circular [1] de estas Yslas, y con esta ocasion tomé conocimientos con muchos Yndios y Españoles de sus havitantes, y entre ellos fueron Dn. Miguel Barrientos y sus hijos existentes en el partido de Quiquell [2]. Estos por el mes de Abril de este año de ochenta y


    Por otra parte, podemos inferir que el autor no se dejaba llevar solo por su espíritu emprendedor i hasta cierto punto aventurero, al lanzarse a estas esploraciones, sino obedecia a un fin positivo, recomendado por el rei i aprobado por las autoridades del Archipiélago.

    Con este argumento se vindica ademas de modo indirecto de los cargos, que le hacian Moraleda i los vecinos de Chiloé, que emprendiera estos viajes para buscar a los Césares. Veremos con todo que las ilusiones de esta leyenda romántica tenian efectivamente un tanto cautivada su imajinacion.

    Observamos de paso, que la mision de Cailin, de que nos ocupamos aquí por incidente, ha hecho un papel importante en la historia de Chiloé. Desde la conquista hasta hace poco era el fin austral de la cristiandad i la estacion intermedia entre ésta i las tribus salvajes de los Chonos. Los misioneros que iban a catequizarlos, recalaban siempre a ella ántes de atravesar el peligroso golfo de Huafo.

    El último misionero jesuita de Cailin, el Padre Joseph Garcia, emprendió desde ahí en 1766 su memorable Viaje hácia el Sur [n 1]. A él correspondia sin duda en derecho el mentado premio por las entradas.

  1. Tocó a Menendez desempeñar la tarea mas difícil i penosa de las misiones, de recorrer las capillas i puntos del archipielago que no podian ser atendidos directamente por los misioneros establecidos de fijo. Como sacerdote prestijioso i viajero avezado era sin duda la persona mas apta posible para desempeñar cumplidamente las funciones de este ministerio penoso.

    Poseemos varias descripciones de este servicio relijioso tan importante en la vida patriarcal de los isleños (Claudio Gay [n 2], Ch. G. von Murr [n 3], Agüeros). Los jesuitas llamaban esta parte de su ministerio "la mision andante o anual"; era servida desde setiembre a mayo por dos relijiosos. Con los franciscanos corria al cargo de uno solo i duraba ménos tiempo, tal vez por haber mayor número de misiones fijas. Esta circunstancia da ha lugar a Menendez de hacer sus esploraciones.

  2. La apreciable i numerosa familia de los Barrientos, los fieles guias i compañeros del autor, se componia, segun resulta de la relacion de éste,

  1. Nacrkichten, aus dem spanis chen Amerika von Ch. G. von Murr, Halle 1809 p. 437 i Anales de la Universidad 1871, t. II p 351.
  2. Historia política, t. IV p. 183.
  3. l. c. p. 600.