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De Cuba con amor yyy
A pedido de Zulma
Llegó el tour repleto de ex- pectativas y de turistas argen- tinos, entre los cuales estaba yo, esperando ver con qué me en- contraría.
En el primer momento la so- ledad de mí misma , la ciudad con sus casas de frentes descas- carados me desazonó. No era Eu- ropa, no, claro que no, quería volverme a mi lugar. ¿Para qué fuí? ¿Qué suponía?
Luego, casi rápidamente, en el mismo día, todo cambió. Me inserté en el grupo, un poco a los manotazos, hasta que me in- tegré. No sólo me ubiqué sino que pude manejarme yendo de una persona hacia otra con toda na- turalidad y hasta sintiéndome reclamada por ellos; llegué a ser casi la preferida de todos.
Y La Habana, Cuba entera, me impactó. No podía explicar qué me sucedía. Sólo sabía que acu- mulaba emociones, cosas distin- tas, asombro. A cada paso me
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preguntaba: ¿Estaré viendo bien? ¿Soy capaz de darme cuenta qué significa este mundo tan distin- to? Sí es cierto que estaba pre- parada para receptar positiva- mente toda diferencia, no estaba segura de que fuera así. Hasta que empecé a reconocer en los cubanos su cordialidad, su bon- homía, su paz, su entusiasmo, su amor, su futuro.
El encuentro con las mujeres de la Federación de Mujeres Cu- banas fue extraordinario. Me mostraron su fuerza, su amabili- dad, su deseo de seguir cono- ciéndonos. Ya tenían un ejem- plar de nuestra "Alternativa Fe- minista" y querían recibir todos los números, nuestra correspon- dencia, en adelante. Nos dieron su material y toda su Simpatía y+ fervor. Ellas, las mujeres cu- banas, ya han conseguido muchas : de las cosas por las que noso- tras luchamos aquí: educación sexual a la juventud, anticon-- cepción, aborto, estudios gené-- ticos en la mujer embarazada, además de educación, medicinas preventiva, alimentación, vi-- vienda, sin niños abandonados, .:.
